Maná batió récords en terreno leonés

Nunca se había visto nada igual en León. Un torbellino, o mejor dicho, una revolución, fue la que se vivió ayer en el estadio de fútbol Antonio Amilivia, donde cerca de 22.000 personas por un lado, y cuatro por el otro, protagonizaron un récord absoluto que pasará a los archivos y a la memoria colectiva de la capital leonesa: el de Maná ha sido el concierto más multitudinario de cuantos hayan tenido lugar en esta ciudad, superando al de Shakira del año pasado por estas mismas fechas. El Amilivia ofrecía un aspecto completamente espectacular, con las gradas llenas y el campo a rebosar, y todos cuantos se encontraban allí anoche, por fuerza, tuvieron que pensar que estaban formando parte de algo muy grande: desde Madrid, Cantabria, Asturias, Valladolid, y hasta Europa y América, se desplazaron cientos de fans de la exitosa formación mexicana, pero sobre todo eran miles las gargantas leonesas que no dejaban de corear todas y cada una de las canciones de los autores de esta gira mundial Amar es combatir . Con algo más de media hora de retraso apareció sobre el escenario el líder de la banda, Fher Olvera, para absoluto delirio de un público heterogéneo en el que cabían todas las edades. «Lo van a pasar guacho con los mexicanos», anunció, tras de lo cual llegó el primer tema, Déjame entrar . Y con él, la fiesta. Lo que vino a continuación fueron vatios y vatios de excelente sonido, letras románticas, apasionadas o desgarradas, de amor y de desamor, de su nuevo disco y de los anteriores. Cuatro pantallas gigantes ofrecían todas las perspectivas posibles de Fher, Álex, Vampiro y Sergio, y de su encantado público. Cariñosos, amables (llamaron «guapas» a las leonesas), currándoselo, sacaron lo mejor de sí mismos y de su música para ofrecérselo a León. Lo más, cuando sacaron a una fan (Isabel) de entre el público y la invitaron a una copa de vino. Unos auténticos caballeros. No estamos acostumbrados a ver cosas así.