El festival de teatro clásico de Olmedo cierra hoy sus puertas

Hay quien dice que los clásicos son aburridos, anacrónicos, difíciles de entender y alejados de nuestras preocupaciones actuales. Esta teoría no rige en la pequeña localidad castellana de Olmedo (apenas alcanza los 3.500 habitantes), pues la segunda edición del festival Olmedo Clásico ha roto con todas las previsiones. Si la primera edición fue un éxito, en esta se llegó a colgar el cartel de «no hay billetes». El festival arrancó con la obra Del rey abajo, ninguno , una pieza «difícil de ver y de representar», según el catedrático y codirector de Olmedo Clásico, Germán Vega; sin embargo, y pese a su dificultad, llenó dos días consecutivos el precioso teatro Centro de Artes San Pedro. La calidad de los actores -procedentes de la Compañía Nacional de Teatro Clásico- también invitaron a presenciar la obra del Francisco Rojas Zorrilla, un autor toledano de quien se cumplen 400 años de su nacimiento y que escribió este drama en 1650. Durante la semana se pudo disfrutar de tres obras de William Shakespeare.