Huracán La Sexta garantiza fútbol para el sábado a pesar del conflicto

AUNQUE la industria cinematográfica cada vez produce más documentales, éste es un género que casa mal con la televisión, al menos con la televisión comercial, en nuestro país. Al margen de los famosos documentales de La 2, apenas hay cadenas que apuesten por el género, pese a lo espectacular de muchas producciones y al público que tiene este tipo de cine. Por esto resulta admirable la apuesta que está manteniendo La Sexta, en horario de madrugada, eso sí, por ofrecernos uno de los documentales más estremecedores de los últimos años: Cuando los diques se rompieron: un drama en cuatro actos , que firma el prestigioso director estadounidense Spike Lee, responsable de títulos como Malcolm X . El documental, dividido en cuatro capítulos, se estrenó en el Festival de Cine de Venecia del pasado año, y es un repaso al antes, durante y después, de los estragos causados por el huracán Katrina en Nueva Orleans hace ahora dos años y que causó 1.500 muertos. En estos días que los informativos se han llenado con las devastadoras imágenes del Dean a su paso por el Caribe, en que todos sabemos ya lo que es un huracán de fuerza cinco o en lo que consiste su ojo , la emisión de este documental por La Sexta resulta de lo más oportuno. Que se apunten un 10. Spike Lee ha dividido su visión de la devastación de Nueva Orleans en cuatro partes. No hay reconstrucciones posteriores de imágenes. Todo lo que se muestra fue emitido por las televisiones locales o captado por los videoaficionados. De los cuatro capítulos, el primero, en la noche del lunes, lo dedicó el director a mostrar cómo no se hizo lo que se pudo hacer: se dudó mucho en ordenar la evacuación y ésta se hizo de forma caótica. Los autobuses para sacar a la gente estaban aparcados en una hondonada que se inundó en los primeros momentos. El segundo capítulo, este martes, estuvo dedicado a los testimonios, tanto de los que se fueron como de los que se quedaron, ya fuese en el estadio que acogió a miles de personas o los que se pasaron cuatro días subidos en el tejado de sus casas. Una vez más se vio como la administración Bush quedó paralizada, la ayuda requerida no llegaba nunca, y cuando lo hacía iba directamente hacia los ricos barrios de los blancos. Lee sabe de lo que habla y su trabajo es honesto. No ha rehusado mostrar todas las perspectivas del desastre, la de quienes la sufrieron y la de las autoridades que no se la tomaron en serio hasta que ya era demasiado tarde. Pese a que las películas de Spike Lee siempre han resultado comerciales y han funcionado muy bien en taquilla, posiblemente este documental es una de las emisiones de menor audiencia del verano. No figura en ningún ranking de los programas más vistos, ayudado además por las habitualmente paupérrimas cifras de share de La Sexta y por estar escondido en las madrugadas. Sin embargo, programas como éste deberían ser declarados de utilidad pública. No ya para que los afectados por una catástrofe sepan qué hacer, que al fin y al cabo bastante tienen con luchar por sus vidas, sino para que las autoridades se pongan las pilas. «El sábado a las diez de la noche habrá fútbol en La Sexta con toda seguridad», afirmó ayer el director de la cadena privada, Antonio García Ferreras. En su disputa por la emisión de los partidos de Liga, Mediapro y Sogecable provocaron un cambio de agenda en la primera jornada de la competición, ya que ambas empresas quieren garantizar la retransmisión a sus usuarios. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) dio el visto bueno a adelantar el Murcia-Zaragoza al sábado y retrasar dos horas el Valencia-Villarreal del domingo. García Ferreras indicó que, tras haberse puesto en contacto con Mediapro, ésta les había «garantizado el partido en abierto y gratuito», afirmación que venía a ratificar la posición tomada el lunes por el canal, que aseguró confiar «plenamente en el compromiso por parte de esta empresa para el suministro de la señal de los partidos». El director de la cadena señaló el deseo de «que haya pronto un entendimiento entre Mediapro y Sogecable sobre este asunto». Esta aseveración responde a la decisión de Audiovisual Sport (AVS), la compañía que comercializa la Liga de fútbol -y cuya propiedad es en un 80% de Sogecable-, de cortar a Mediapro, y por tanto a La Sexta, la señal del partido en abierto como consecuencia de un supuesto impago de 58 millones. Por su parte, AVS ofreció al resto de los operadores que emiten partidos en abierto la retransmisión «en iguales términos y condiciones que la anterior temporada». El PP pidió ayer la mediación del Consejo Superior de Deportes (CSD) para poner fin a este conflicto televisivo. Según declaró el portavoz de deportes del PP en el Congreso, Francisco Antonio González: «Las empresas son muy libres si ven dañados sus intereses. Pero nos preocupa que se garantice que el fútbol es televisado, porque entendemos que es de interés general y no se puede sustraer al público la posibilidad de verlo». no borrar