La revista fue secuestrada el 20 de julio por un presunto delito de injurias
Grande-Marlaska lleva a juicio a los dibujantes de «El Jueves»
Pide que se juzgue a los autores de la caricatura de los Príncipes en la publicación
El juez de la Audiencia Nacional Fernando Grande-Marlaska ha dictado la apertura de juicio oral para los autores de la caricatura de los Príncipes de Asturias en la portada de la revista El Jueves , que motivó su secuestro el pasado 20 de julio por un presunto delito de injurias al sucesor de la Corona. Según informaron fuentes jurídicas, Grande-Marlaska adoptó esta decisión en sustitución de su compañero Juan del Olmo, a cuyo juzgado correspondió este procedimiento, por encontrarse éste de vacaciones, y después de que el fiscal informara a favor de llevar a juicio a los dos autores de la caricatura: el dibujante, Guillermo Torres, y el guionista, Manel Fontdevila. Grande-Marlaska inicia así los trámites para que el Juzgado de lo Penal de la Audiencia Nacional, al que corresponde juzgar estos hechos por no superar la pena por el delito de injurias a la Corona los dos años de cárcel -en este caso el fiscal sólo pide para los acusados una multa económica-, señale la fecha del juicio. En un auto dictado el pasado 27 de julio, Del Olmo apreció indicios para sentar en el banquillo a los autores de la caricatura, a los que imputó «indiciaría e inicialmente», a instancias de la Fiscalía, un delito de injurias al sucesor de la Corona fuera de su función institucional y menoscabo del prestigio de ésta, castigado con una multa de hasta 24 meses. Este delito (artículo 491 del Código Penal) prevé una multa de cuatro a veinte meses en el caso de las injurias y de seis a veinticuatro meses si se utiliza la imagen de la familia real «para dañar el prestigio de la Corona», y cuya cuantía económica deberá determinar el juez de lo Penal en sentencia. En su comparecencia ante Del Olmo, que ordenó el secuestro de la revista a petición de la Fiscalía General del Estado, los dos autores de la caricatura declararon que el objetivo de la viñeta era realizar una crítica política a la ayuda de 2.500 euros aprobada por el Gobierno por cada nuevo hijo, y eligieron a los Príncipes por ser la pareja «más popular» de España y que, además, no necesita la subvención. Aseguraron al magistrado que no pretendían injuriar al sucesor a la Corona ni ocasionar un menoscabo del prestigio de ésta.