Cuéntame Los CSI españoles aterrizan en Telecinco

TVE-1 ha estrenado los nuevos episodios de Cuéntame . No le ha ido demasiado bien: arranca más floja de audiencia que otros años, aunque sigue por encima de los 3,5 millones de espectadores. Lo nuevo de Cuéntame mantiene la línea de las últimas temporadas de esta serie: una politización creciente del argumento; se trata de una línea que los guionistas niegan, pero lo hacen contra toda evidencia, porque no hay más que comparar la primera temporada con la última. Y a todo esto, ¿por qué lo niegan? Al fin y al cabo, es verdad que la sociedad española de los 70 estaba muy politizada, en particular en los sectores más «tocados» por la actividad sindical, la reivindicación vecinal y la soflama parroquial. Eso forma parte de la memoria colectiva. La politización llegaba a todas partes y no ahorraba tampoco a los niños, como se mostraba en este episodio. Yo -con perdón- me crié en un barrio periférico lleno de sindicalistas, y en 1975 hice con dos compañeros (Pepe y César, se llamaban: teníamos doce años) una Constitución que declaraba a España «república socialista autogestionaria», al estilo yugoslavo; la proclamamos solemnemente en clase, entre la estupefacción general. Algún otro compañero hablaba de la Joven Guardia Roja, como sale en Cuéntame , aunque nunca vi a la policía deteniendo niños. Tenía su gracia, por cierto, lo de la Joven Guardia Roja en el episodio de este jueves, que era como un homenaje a Pina López Gay -hasta en la cara de la chica-, aunque no sé si muy justo, después de todo. Hay cosas con las que no se puede jugar. Mao ha sido el mayor criminal político de la historia: nadie ha matado a tanta gente en menos tiempo. Ser «maoísta» es una alucinación que tal vez pueda disculparse -en los arrepentidos- por causas diversas (falta de información, ofuscación pasajera, qué sé yo), pero que malamente puede presentarse hoy, a estas alturas, envuelto en los colores de la nostalgia. Ayer mismo detenían en Camboya a Nuon Chea, uno de los líderes del jemer rojo; los jemeres se cargaron a casi un tercio de la población camboyana -se dice pronto- en nombre de la misma revolución que Pina abanderaba y que Cuéntame acaricia con el afecto que se dispensa a un viejo amor juvenil. Después, como es sabido, del vivero revolucionario español no tardaron en salir centenares de directores generales y gobernadores civiles. No sé si Cuéntame llegará a contar esta etapa. De momento estamos en la agonía de Franco y la estupidez del búnker, y uno se levanta del sillón con la persistente impresión de que nos están contando las cosas como alguien querría que hubieran ocurrido, no como realmente ocurrieron. Veremos los siguientes episodios. Un ritmo trepidante, tramas cargadas de acción y una cuidada escenografía son las señas de identidad de R.I.S. Científica , la serie protagonizada por José Coronado que Telecinco estrena en horario estelar este domingo. La nueva apuesta de ficción de la cadena muestra el trabajo de investigación de un grupo especial de la Policía Científica y es una adaptación de la serie italiana RIS, delitti imperfetti , heredera de CSI . José Coronado se introduce en la piel de Ricardo Ventura, un profesional que vive por y para su trabajo. Tenaz y carismático, Ventura es el líder de la unidad encargada de investigar los crímenes más complejos del país, cargo ocupado tras la jubilación anticipada de su mentor. Para el actor madrileño -harto de ver sólo series «con niños y perros» en televisión- RIS es una serie «que apela a la inteligencia del espectador, con guiones muy elaborados y con espíritu de cine». Totalmente volcado en esta nueva experiencia televisiva, Coronado, que se identifica con su personaje en su meticulosidad y dedicación al trabajo, se ha visto «todos los capítulos de CSI» para meterse en la piel de un personaje «con gran vida interior». La primera temporada de la producción de Videomedia se abre con una impactante secuencia: el estallido de una bomba en el laboratorio del equipo protagonista. Este suceso será el desencadenante de un flashback que situará al espectador tres meses atrás, en el primer día en la unidad de la informática Ana Galdeano, personaje interpretado por Irene Montalá ( Tu vida en 65 minutos ). Cada episodio enlazará dos historias que concluirán al final del mismo, junto a una trama de continuidad, presente en los trece capítulos que componen la primera temporada de RIS . Ésta consistirá en averiguar la identidad de un personaje calificado como Unabomber, que está sembrando de artefactos explosivos la ciudad. Triangulo amoroso Ricardo Ventura contará en su equipo de investigación criminal con un reducido grupo de integrantes que le ayudarán en la resolución de diversos crímenes. La andaluza Belén López ( Motivos personales ) encarna a Claudia Barea, una médico forense alegre y vital que vivirá un romance informal con su jefe. Un triangulo afectivo que completará Ana Galeano, interpretada por la catalana Irene Montalá, una niña bien rebelde pero brillante que provocará más de un conflicto en la unidad. Un químico introvertido (Carlos Leal), un mujeriego especialista en balística y artes marciales (Ismael Martínez) y un policía de raza en la piel de Pedro Casablanc conformarán la unidad capitaneada por José Coronado. El reducido elenco se completa con Juan Fernández ( Lobo ), en la piel de Guillermo Cuevas, mentor de Ventura y antiguo jefe del grupo, que seguirá vinculado a la unidad para ofrecer su asesoramiento en el esclarecimiento de los casos. En el primer episodio de la serie, una joven aparece muerta con gran violencia y sin más pisa que una flor en la boca. Con la aparición de otra mujer asesinada de manera similar se confirman los peores temores, se trata de un asesino con en serie con el que se enfrentará Ana, recién llegada al equipo. Por otro lado, un sacerdote muere en extrañas circunstancias. Un caso relacionado con la sombra de la sospecha de abusos sexuales a menores que cierne sobre el cura y que convierte a los padres de los niños en sospechosos. La nueva apuesta de producción propia de Telecinco ocupará el prime time del domingo, un hueco reservado tradicionalmente al humor ( Aida, Siete vidas ). RIS Científica competirá con las producciones extranjeras, Sin rastro (Antena 3) y Medium (Cuatro), el cine, La película de la semana (TVE1) o los programas deportivos de La Sexta y La 2.