El director del congreso destacó que Victoriano Crémer ha sido la voz más oída y leída de León
Crémer: «El problema que tengo es que me sobran setenta años»
Fue un día para las emociones, pero también para analizar en profundidad la obra de una de las grandes voces poéticas del último siglo. «El problema que tengo es que me sobran 70 años», dijo Victoriano Crémer a su llegada a la Obra Social -sede del congreso que analizará hasta el viernes su trayectoria literaria-. Rodeado por una nube de periodistas, el veterano de la prensa leonesa dijo que a él el congreso le daba igual, puesto que no le pagaban. En el mismo tono añadió: «Yo soy uno del público». Crémer, que mantiene una columna diaria en este periódico y que está a punto de publicar una nueva novela sobre la instrahistoria de León, titulada María Maragata, dijo que jubilarse viene de júbilo y que, por lo tanto, a él no le llena de júbilo dejar algo a lo que ha dedicado toda su vida. Y se comparó con Guzmán el Bueno, alguien que contempla el transcurrir de una ciudad -a la que calificó de «apática y con retranca»- y que «quiere ser todo lo bueno posible». Pese a que el congreso reúne a los mayores especialistas en la obra del escritor, que ha tocado prácticamente todos los géneros, desde la poesía al ensayo, pasando por el teatro y la novela, afirmó que «un congreso de esta índole no tiene importancia, le ocurre a cualquiera que se descuide». Sobre la evolución del periodismo desde que él comenzó en el oficio, primero como cajista, Crémer afirmó que la única diferencia está en la sociedad. Una sociedad que antes -dijo- «era muy limitada, empobrecida y muy comprometida con su propia casta. Yo era de los pobres, porque no me dio tiempo a ser rico». En el fondo, añadió, «en León seguimos igual». «Yo lo que quiero es dinero» La consejera de Cultura, María José Salgueiro, abrazó cariñosamente a Crémer antes de que diera comienzo el congreso. «Tenía muchas ganas de conocerte», aseguró. Crémer respondió: «Yo lo que quiero es dinero». Salgueiro, que un día antes había inaugurado un congreso dedicado al escritor vallisoletano Miguel Delibes, no quiso establecer comparaciones sobre el trato dispensado a uno y otro escritor desde la Junta. En su opinión, «Crémer es un poeta muy conocido, reconocido y valorado en Castilla y León y en España». Ya en la mesa de autoridades que presidieron el acto, Salgueiro pronunció un discurso cargado de poesía. De Crémer dijo que lleva «un siglo minando la desesperanza» y que su escritura ha sido, sobre todo, libre. Una poesía -añadió- «apasionada de la causa del ser humano». La consejera afirmó que «el poeta canta para decir y que al decir nos conmueve». Más breve y prosaica, Isabel Carrasco, presidenta de la Diputación, institución que colabora en la organización de este congreso, recordó que la Corporación Provincial había concedido, por unanimidad, la máxima distinción a Crémer -la Medalla de Oro de la Provincia- coincidiendo con el centenario del autor de El fulgor de la memoria. Carrasco afirmó que Crémer era un escritor fundamental para comprender lo que es León. «El congreso servirá para concienciarnos aún más de la importancia literaria y humana de Crémer» El escritor Gonzalo Santonja, director del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, organizador del congreso, descolocó al público que había acudido a escuchar la peripecia vital y literaria de Crémer al hacer un balance de aquella institución. Pidió disculpas por lo que no había hecho por León y anunció la inminente publicación de un estudio sobre el leonés. «El Instituto es consciente de lo que significa León en el mundo. El Instituto ha tenido problemas y pido disculpas». A continuación confesó que milita en la causa de Victoriano Crémer. Y abogó por financiar una recopilación sobre su obra periodística. Santonja confesó que admira a Crémer porque «es el poeta del hombre sin adjetivos. Es el poeta que va a durar cuando nuestra memoria se haya oscurecido». La voz más leída El catedrático de Literatura de la Universidad de León y crítico de Diario de León, José Enrique Martínez, director del congreso, afirmó que, sin duda, «Crémer ha sido la voz más oída de León y la voz más leída del periodismo leonés». Martínez confesó que la preparación del congreso había sido una ardua labor de un año. Agradeció a las instituciones su colaboración para la preparación de los actos y prometió que se publicarán todas las actas del congreso. Santos Llamas, presidente de Caja España y de la Fundación Carriegos, quiso destacar su admiración personal por Crémer, del que subrayó su entera disposición para poner en marcha el aula que lleva su nombre, ubicada en la Casona de los Pérez, que el lunes abre al público.