Escritora
«Cada día hablo con los muertos»
La escritora cubana publica «La cazadora de astros», una novela en la que refleja su íntimo vínculo con la pintora española Remedios Varo
Zoé Valdés nació en 1959 en La Habana, ciudad que abandonó a mediados de los años noventa para instalarse en Francia, el país donde sigue viviendo. Acaba de publicar La cazadora de astros, una obra editada por Plaza & Janés en España. La novela cuenta la historia de varios personajes, escritores, pintores y artistas, cuyas vidas se entrecruzan. -¿Cómo definiría su novela «La cazadora de astros»? -En principio, yo creo que es una novela y punto, aunque añadiría que quise hacer una novela surrealista. Lo que pasa es que el tono de la novela era demasiado surrealista y decidí rebajarlo, para hacer una novela más comprensible al lector. Algunos tienen cierto pudor en reconocer que hablan a diario con los muertos y con los vivos. -Dice usted que «La cazadora de astros» es una novela sin más, pero tiene algo de mágico. -Como dice un personaje en mi novela, el surrealismo no está en declive, porque es un sentimiento inherente al ser humano. Vivimos en un mundo muy veloz y alejado de lo que fue el surrealismo, pero, sin embargo, en la vida diaria, en la rutina y la cotidianidad hay momentos muy surrealistas. -¿Por qué es tan reacia a definirse como escritora? -Escribo porque me gusta y lo necesito y para que me lean, claro. -¿No le parece un tanto absurdo que en España los críticos se sacaran de la manga lo del «realismo mágico» al referirse a los escritores del denominado «boom latinoamericano»? -Ha sido un término que les ha hecho mucho daño a los escritores latinoamericanos. Nunca he sabido lo que es el llamado realismo mágico. La generación de escritores latinoamericanos posterior al llamado realismo mágico lo pasó muy mal; si no pertenecías al grupo de los del realismo mágico, no eras nadie. -¿Cree que esta libertad está seriamente amenazada en el mundo? -Por desgracia, sí. Y no sólo en las dictaduras, donde no existe, sino también en los países democráticos. Nos quieren dar gato por liebre cada dos por tres. -En su novela hay otro elemento muy importante y es el exilio. -Toda la novela es autobiográfica. Creo que es una de mis novelas más autobiográficas.