Gradefes pide a la Junta que exija a Talactor la devolución del reloj solar

Tras la publicación en Diario de León del descubrimiento tres años atrás de un reloj solar y varias prendas de monjes durante las últimas excavaciones en San Miguel de Escalada, la alcaldesa de Gradefes, Ana Isabel Ferreras, se ha puesto manos a la obra. En una carta informa a la Dirección General de Patrimonio de la Junta de los hallazgos y, al tiempo, destaca el hecho de que la empresa arqueológica no ha entregado aún las conclusiones ni depositado los materiales en el Museo de León a pesar de haberse cumplido los plazos previstos por la ley. «Mi deber es custodiar y velar por el patrimonio del municipio», resalta y destaca la obligación de la empresa Talactor de hacer entrega de las piezas descubiertas. Ana Ferreras asegura que una vez hayan sido depositadas en el Museo de León solicitará a su director la firma de un convenio para que las ceda en depósito y puedan exhibirse en el futuro centro de interpretación del monasterio. El hallazgo se produjo durante las ultimas excavaciones realizadas en San Miguel de Escalada, entre los años 2003 y 2004. Los responsables de la empresa adjudicataria de la excavación aseguraban hace menos de un mes que, de momento, no entregarían estas piezas puesto que la investigación no había finalizado y las conclusiones de los trabajos arqueológicos no se habían ultimado. El responsable de Talactor, Emilio Campomanes añadía además que con los resultados del estudio se publicará un libro, si bien rechazaba hablar de plazos y fechas límite. En cualquier caso, y en opinión de los expertos, los hallazgos tendrían una importancia capital y, de hecho, el propio Campomanes admitía que, en el caso del reloj solar, la pieza no tiene paralelos conocidos. Los arqueologos e historiadores consultados hacen hincapié en el hecho de que los ropajes descubiertos pueden ser materiales únicos, puesto que existen poquísimos ajuares religiosos medievales. No obstante, precisan que no sería lo mismo si se tratara de mantos del siglo del XVI que del XIV. «Incluso podría darse el caso de que fueran anteriores, con lo que la importancia seria sobresaliente», destacan. Entre ellos, podrían estar los utilizados para amortajar a Fray Antonio de Guevara, confesor de Felipe II. Asimismo, se cree que allí descansaba el abad que en el siglo X encargó una copia del Beato al monje Maius, joya que conserva la Morgan Library de Nueva York y que estos días centra la polémica. Cabe reseñarse el hecho de que la Junta está a punto de licitar la primera fase del estudio de documentación para el que será el centro de interpretación de Escalada. Es decir, quien finalmente se haga cargo de este proyecto -con toda probabilidad se tratará de Artemio Fernández Tejera- debería poder contar con la documentación precisa de estas piezas con el fin de que se incluyan en el estudio.