Caja España destina 160.000 euros para acondicionar el Museo Etnográfico de Mansilla
El presidente de Caja España, Santos Llamas, y la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco, suscribieron ayer un convenio de colaboración por el cual la entidad bancaria aporta 160.000 euros que se destinarán a obras de acondicionamiento del Museo Etnográfico de León, ubicado en Mansilla de las Mulas. El centro estará abierto al público a partir del próximo mes de febrero y albergará 3.500 piezas. Llamas destacó que hasta el momento la entidad que preside ya ha aportado 900.000 euros para poner en servicio el museo, que pretende ser «un revulsivo» para toda la comarca de Mansilla de las Mulas. Además, Llamas reiteró la intención de colaboración de Caja España con un proyecto que atraerá un gran número de visitantes, ya que se encuentra cerca de la capital leonesa y que potenciará la futura autovía León-Valladolid (A-60). La presidenta de la institución provincial, Isabel Carrasco, aseguró que el museo pretende ser «regional» y avanzó que el próximo año, una vez se abra al público, iniciará el procedimiento administrativo para solicitar a la Junta de Castilla y León esta calificación. El museo ha supuesto un gran «esfuerzo», y constituye una apuesta por la «tradición, la cultura y la etnografía de la provincia» que, según Carrasco, no se conoce puesto que la mayor parte de las piezas de las que se disponen han permanecido guardadas en los fondos del Instituto Leonés de Cultura (ILC). La Diputación de León pretende, según precisó su presidenta, desarrollar el interés turístico de la zona ya que en ella se encuentra monumentos tan importantes como el monasterio mozárabe de San Miguel de Escalada. Las obras del Museo Etnográfico han supuesto una inversión de más de cinco millones de euros e incluyen tanto la adecuación del antiguo convenio de San Agustín como la posterior musealización. El nuevo edificio es obra del arquitecto Mariano Díez Sáenz de Miera y comprende la construcción de una superficie útil de 3.504 metros cuadrados. El inmueble se adapta a los restos del antiguo convento y se articula en un espacio de planta de tendencia cuadrangular con patio central cerrado, planta baja y dos pisos, con un amplio sótano almacén y con un gran vestíbulo que da paso a una amplia estancia.