Jesús Celis: «No se puede excavar lo que no se pueda conservar»
Hasta la fecha, son escasos los restos astures encontrados en Lancia. En todo el mundo astur no ha aparecido ninguna necrópolis prerromana. Tampoco en Lancia. Quizá porque los astures no enterraban a sus muertos. En la prospección llevada a cabo este verano en la zona norte del yacimeinto, una de las más arrasadas cuando estos terrenos eran campos de labor, han aparecido edificios de la fase tardía (del siglo IV). En una de esas viviendas se encontró una dolia (gran vasija de almacenaje, utilizada para conservar aceite, vino¿), así como restos del hogar y cadenas o pregancias - de las utilizadas para sujetar los pucheros sobre el fuego-. En otro solar se encontró un gran depósito de tégulas (tejas). «Pretendemos hacer las cosas muy bien. Despacio, pero haciendo muchos análisis de los materiales», asegura Celis. Con los datos que han ido saliendo a la luz en once campañas de excavaciones así como por las fotografías aéreas del yacimiento, los expertos han podido descubir el urbanismo de la ciudad. Celis reconoce que quedan muchos años de excavaciones, pero asegura que «no se puede avanzar deprisa». «No se puede excavar lo que no se pueda conservar». La lentitud de las excavaciones es, sin lugar a dudas, una cuestión de presupuesto. Y, hasta la fecha, Lancia nunca ha sido una prioridad para la Diputación.