TELEVISIÓN
La productora Warner Bros se come a New Line Cinema
El pez grande siempre se come al chico y Hollywood no es una excepción a esta regla universal. Tras 40 años de vida y éxitos a sus espaldas como las franquicias de Pesadilla en Elm Street, Viernes 13 o las más recientes de Blade, Austin Powers o la multioscarizada saga de El Señor de los Anillos, New Line Cinema ha puesto el punto y final a su andadura en solitario y pasará a ser una filial del gigante Warner Bros. Una operación de absorción que se ha precipitado tras el rotundo fracaso de la última superproducción de New Line, La Brújula Dorada que protagonizada por Nicole Kidman y Daniel Craig costó más de 250 millones de dólares y no logró recaudar ni 70 millones en taquilla. Pero cifras al margen, la fagocitación de New Line por parte de la Warner, supondrá un verdadero drama para cientos de familias ya que puede costarle su empleo a muchos de los 600 trabajadores que la compañía tiene en sus sedes de Los Angeles y Nueva York. | ep