Actor
«Me gustaría que la película removiera conciencias»
Jose Coronado habla en esta entrevista de su última película, en la que interpreta a un amenazado por ETA
Es uno de los ejemplos de que el oficio de actor se aprende trabajando. Periodista, bombero, policía, economista y ahora amenazado por ETA en la nueva película de Manuel Gutiérrez Aragón, Todos estamos invitados . -¿Cómo afronta el estreno de esta historia de amenazas, miedos y memoria? -Estoy muy satisfecho con la película, es muy digna y se ve muy bien. Esta historia de amor en un territorio hostil es una aportación de los que trabajamos en esto y pretendemos que la sociedad reflexiona sobre un tema que, desgraciadamente, nos toca a todos tan de cerca. La historia pasa aquí, pero podía ser en Colombia con las Fuerzas Armadas Revolucionarias porque habla del miedo a opinar libremente. -Los amenazados de ETA tienen muy poca presencia en la gran pantalla ¿por qué? -No lo sé. Todos estamos invitados no es un filme para hacer amigos precisamente. No tiene ningún color político porque habla de un hombre que no es valiente, tampoco es cobarde, y no es ni tonto ni listo. Es un tipo normal, como la mayoría de los ciudadanos, y no le dejan vivir porque cree en el diálogo y la tolerancia. Esta situación me produce una inmensa tristeza. He indagado con todo tipo de amenazados. -Supongo que ahora entiende mucho más el día a día de los amenazados. -Siempre he seguido muy de cerca lo que pasa, pero ahora lo vivo de manera distinta. Siento una impotencia y una rabia...Es terrible no poder opinar, tener miedo a expresarse. -Personalmente, ¿qué le gustaría que pasara con «Todos estamos invitados»? -Que moviera conciencias, pero no sé... Si hubiese más películas, más libros, más artículos de prensa sobre el tema, pues podría influir.