El presidente de honor de la feria pide profesionalidad porque, si no, «es mejor no hacer nada»
«Leer León debería trabajar el año entero con una oficina permanente» Comienza hoy la «edición leonesa» del célebre Titirimundi
José María Merino defendió el trabajo en las aulas: «Ahí es donde se gana la batalla de la cultura»
Las jornadas de literatura iberoamericana Entre dos orillas culminaron ayer su rumbo con la participación del escritor leonés, académico de la RAE y presidente de honor de la feria José María Merino (el también académico Luis Mateo Díez no pudo acudir finalmente a estos encuentros). Merino, que en su día ganó el premio Nacional de Literatura Juvenil, se centró sobre todo en su libro El oro de los sueños , una aventura entre dos mundos, el indígena americano y el colonial español, repleto de referencias míticas e históricas. De hecho, la obra narra el choque «entre la cultura histórica y la cultura mítica, fue la primera globalización del mundo, una globalización dolorosa», recordó el autor. Respecto a sus estrategias de comunicación con los jóvenes, José María Merino comentó que, cuando le invitan a ir a colegios e institutos, «siempre acepto, porque eso es el frente de combate, la primera línea, las trincheras, ahí es donde se libra realmente la batalla de la cultura». Y ¿quién está ganando, hoy en día, esa batalla? Para Merino, «la están ganando los grandes medios de comunicación de una forma tremenda». Ahora bien, desde un punto de vista «masivo», la gente «está leyendo más, existen actualmente muchos más fenómenos de invitación a la lectura». Pero sí se ha perdido, razonó José María Merino, «mucho código lingüístico». Por ejemplo, el libro El oro de los sueños , que fue espléndidamente recibido en colegios de toda España, ya que lo utilizaban como material literario y también histórico, «lo entendía mejor hace quince años que ahora, ahora les cuesta más». Esa pérdida de riqueza léxica la achaca en parte al uso de los móviles, esas «maquinitas de descerebrar», como las llamó, y la percibe también en la calle, donde se ha perdido «la variedad de matices y la propiedad con la que se hablaba antes». Con respecto a Leer León, de la que Merino es presidente honorífico, el autor de Cuentos de los días raros opinó que sería conveniente «institucionalizar la organización», crear «una organización permanente que esté todo el año presente, tomando decisiones, dando a conocer la feria tanto en León como fuera, y que esté conectada con el resto de ferias similares». Merino pidió «profesionalidad y organización» ya que, si no, es mejor no hacer nada. También se refirió a su presencia en la RAE -ya se ha sentado en el estrado pero aún no ha tomado posesión oficial de su asiento- institución en la que se ha sentido «extraordinariamente bien recibido»: «Estoy deseando entrar a trabajar, voy a aprovechar al máximo esto de estar, de alguna manera, dentro de las palabras». Las tres jornadas profesionales de fomento de la lectura que celebra Leer León (las de literatura iberoamericana, las de la editorial SM y las de la Universidad Complutense de Madrid) han traído hasta la capital leonesa a algunos de los más activos e influyentes estudiosos y creadores que trabajan sobre las letras para niños y jóvenes. Una de las actividades más espectaculares, seguidas y populares de la feria Leer León es la celebración de varias funciones procedentes del veterano certamen segoviano Titirimundi. Hoy en la plaza de San Marcos comienza esta edición leonesa con las compañías Los Duendes (a las 13.00) y Tukitrek (a las 20.00). Los Duendes es una veterana compañía de teatro de títeres especializada en montajes dedicados al público infantil. Originaria de Argentina, se instala en España en 1977, primero en Madrid y desde 1978 en Valencia. Ha participado en los más importantes festivales internacionales de títeres y ha sido invitada a actuar en certámenes de toda Europa: lleva 30 años derramando arte por todos los poros y consiguiendo premios allí donde actúa. Hoy ofrecerá su particular versión de diferentes cuentos infantiles. Por su parte, la compañía brasileño-española Trukitrek traerá esta tarde a León su fascinante Hôtel Crab . El grupo ha informado que en un principio se decantaron «por obras con marionetas clásicas de hilos, pero poco a poco, como si se tratara de una transformación mágica y química, fuimos cediendo a nuestros muñecos partes de nuestros propios cuerpos, manos, pies y brazos, hasta aceptar finalmente dar la cara por sus personajes». Marionetas vivas al límite entre teatro y teatro de figura, condimentadas con música, poesía y toques de comicidad. Hôtel Crab , lleno de imaginación, sorpresa y toques oníricos, es su último montaje.