«Los campamentos estables de León marcaron la línea a seguir en los otros límites del Imperio»

La participación en este proyecto transcontinental de un experto como Ángel Morillo, desde León, es buena prueba de la importancia de la huella romana (y ástur) del hoy territorio leonés y el legado dejado en nuestras ciudades y villas por aquella civilización. Un legado que durante mucho tiempo se dejó de lado y que muchas veces hoy en día se sigue orillando, como lo prueba la licencia de obras concedida a una empresa para construir junto a la muralla de León, en clara contradicción con el Plan Director de ésta. En estos momentos, no obstante, la obra está paralizada. Además, la importancia de la región leonesa en este proyecto internacional viene dada, como recuerda Morillo, por el hecho de que los primeros campamentos estables que se ubicaron en estas tierras «marcaron, en gran medida, la línea a seguir en el resto del Imperio Romano». También precisó que el proyecto está sustentado a medias por la Comisión Europea y cada país participante (en el caso español, por el Congreso de Arqueología que León acoge cada año, no por el Ayuntamiento), entre los que se encuentran, entre otros, Holanda, Alemania, Austria, Hungría, Rumanía o Eslovenia.