Prohibido durante el franquismo, es hoy la última leyenda viva del cante hondo crítico
El cantaor Manuel Gerena ofrece estanoche en León su «flamenco libertario»
El artista sevillano abre esta noche en la plaza de Regla el ciclo «Veranea en la música»
Estuvo censurado durante el franquismo y se convirtió en la voz prohibida. Sin embargo, nunca consiguieron acallarle. Hoy es una de las últimas leyendas vivas del flamenco. Manuel Gerena, el máximo exponente del cante hondo crítico, ofrecerá esta noche un concierto en León con el que se inaugura el ciclo V eranea en la música, organizado por el Ayuntamiento, y que tendrá lugar todos los martes de julio y agosto en la plaza de Regla. Aunque Gerena considera que hablar de «cante hondo crítico» es una redundancia, porque este canto es una larga protesta conectada con todas las insatisfacciones y limitaciones de un pueblo a lo largo de una historia lamentable, en su caso, tal calificativo, por reiterativo que parezca, no es gratuito. Se lo ha ganado a pulso y, también, con valentía. El cantaor de la Puebla de Cazalla supuso una auténtica revolución en una época en la que ya había grandes cantaores, pero su lucha política y su labor contestataria le marcaron para siempre. El cantaor fue perseguido a finales de los años sesenta por sus letras contra el régimen franquista. Manuel Vázquez Montalbán, José Manuel Caballero Bonald y Antonio Burgos son algunos de los escritores que se la jugaron en un momento difícil hablando de Gerena, pero también lo utilizaron para posicionarse ideológicamente. Gerena no ha ocultado nunca su profunda admiración por el gran poeta de Orihuela Miguel Hernández, un hecho que explica que primero comenzara su labor artística escribiendo letras, un trabajo que desembocó en su carrera como cantaor flamenco Curiosamente, el cantaor sevillano sigue «vetado» en la actualidad en algunos festivales de Andalucía, porque, según el escritor Manuel Bohórquez, «el mundo del flamenco continúa plagado de reaccionarios», según explica en el libro Manuel Gerena. La voz prohibida, donde ha pretendido hacer justicia a una de las grandes voces del flamenco. Para el flamencólogo José Manuel Gamboa, Gerena es uno de los primeros autores del flamenco y uno de los pocos que siguieron escribiendo después de la Guerra. Para este experto, Gerena «no es sólo un creador de letras, sino un cantaor, es un ejemplo de una persona que ama el flamenco en toda su dimensión». Discípulo del poeta de Orihuela En el 2001, el cantaor andaluz afincado en Toledo regresaba al mercado discográfico tras una década sin grabar, con un disco que incluía fragmentos originales de la voz de Miguel Hernández, del que siempre ha sido un firme discípulo. «Es mi maestro del verso y entonces yo soy su discípulo a la hora de escribir», ha asegurado en alguna ocasión el cantaor sevillano, a quien también se ha definido como cantautor, según el mismo reconoce, por su trayectoria personal de lucha contra el franquismo. Se le ha comparado con Serrat o con Lluis Llach. El disco Manuel Gerena canta con Miguel Hernández surgió de un encuentro que el cantaor mantuvo con la familia del poeta de Orihuela, que le invitó al acto en que fue nombrado doctor honoris causa, a título póstumo, por la Universidad Miguel Hernández de Elche. Fue entonces cuando Gerena le prometió a los descendientes del poeta alicantino que iba a grabar el disco. Y es que, para Gerena, Miguel Hernández es un poeta auténticamente flamenco, por su raíz profunda y ese lenguaje llano del pueblo, de autodidacta. También hay en las biografías de ambos otras similitudes. Sus vidas han sido, en cierto modo, paralelas. Les unen una carrera dura y haber luchado contra la intolerancia. Previsiblemente, Gerena hará esta noche un repaso por los temas de este disco, que incluye, entre otras composiciones, Vientos del pueblo me llevan (granaínas), Mientras el alma me suene» (malagueña y verdial) y El niño yuntero, en la que se combinan polo y soleá, bamberas, peteneras y martinetes. Lugar: plaza de Regla (Catedral). Hora: 22.00. Entrada: gratuita.