Jóvenes voluntarios destierran las mayores fosas de la Guerra Civil
Jóvenes voluntarios armados de paciencia siguen desenterrando este verano el mayor conjunto de fosas comunes de la Guerra Civil y el franquismo en el antiguo cementerio malagueño de San Rafael, que da una idea de la magnitud de lo que los familiares de los fusilados llaman «el holocausto de Málaga».Existe constancia documental de que se produjeron fusilamientos en el lugar desde febrero de 1937, fecha de entrada de las tropas nacionales en Málaga, hasta 1951, explica Sebastián Fernández, profesor de la Universidad de Málaga y director técnico del proyecto de exhumación de los restos. Por ello, se puede hablar de una «represión muy programada y sistemática de los republicanos y de personas que probablemente no tenían ninguna vinculación política», apunta el director del proyecto.