Luis Mateo Díez unirá sus últimas doce obras en «Las fábulas del sentimiento»

efe | valladolid

El escritor leonés Luis Mateo Díez anunció ayer su intención de recopilar «en uno o dos años» las doce novelas que componen el imaginario de las «fábulas del sentimiento», por lo que éste será el título elegido para esa antología.

Tras recibir en la Feria del Libro de Valladolid el séptimo Premio de la Crítica de Castilla y León, convocado por la Fundación Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, por la obra Los frutos de la niebla , Luis Mateo Díez ha expresado su convicción de que con esta última obra ha culminado un recorrido por el «lado oscuro y extraño de lo que somos».

«Las tareas que se emprenden deben culminarse, yo tenía la convicción de que eran doce» (novelas), resumió ayer el novelista leonés para explicar que el Premio de la Crítica le ratifica en la idea de que esta última obra es «el colofón real» a la senda literaria iniciada en el año con La ruina del cielo y continuada después con obras como El reino de Celama , Fantasmas de invierno y El árbol de los cuentos , entre otras.

Mateo Díez insistió en su agradecimiento hacia los que durante los últimos años le han brindado su «ánimo para seguir» y recordó en concreto la figura del crítico Claudio Guillén, ya fallecido, a quien definió como un «enorme avalista» de su obra literaria. Sobre el premio recibido ayer, el escritor nacido en Villablino expresó que es un galardón «cercano, emotivo y sorpresivo» que recibe «encantado» y que le deja «especialmente complacido», al valorar su trabajo plasmado en una docena de fábulas que tienen una «idea común» pero que respetan su individualidad.

La concejala de Cultura del Ayuntamiento de Valladolid, Mercedes Cantalapiedra, le hizo entrega de una pequeña escultura de Venancio Blanco, y el profesor, crítico literario y colaborador de Diario de León Nicolás Miñambres trasladó a los asistentes al acto la esencia de lo que ha hecho a Mateo Díez merecedor de este galardón.

En palabras de Miñambres, asimismo portavoz del jurado, la última obra del autor leonés equivale a un «símbolo creativo de toda una trayectoria» y constituye «la punta de un consistente iceberg literario». Miñambres aseguró que en jurado no hubo «disensión» alguna y que las narraciones de Mateo Díez se encuentran a medio camino entre las novelas y el cuento. Por ello, sostuvo que sus relatos cortos son la «crónica literaria de sus intrahistoria».

Seres marginales y derrotados

El jurado ha tenido en cuenta a la hora de premiar la novela de Mateo Díez su «apuesta muy arriesgada» para plasmar en sus páginas un «aprecio sincero por los seres humildes y marginales frecuentemente derrotados por la vida».

Por su parte, el presidente del Instituto Castellano y Leonés de la Lengua, Gonzalo Santonja, celebró que el premio que convocan anualmente se vaya consolidando entre los grandes escritores de la comunidad autónoma, quienes «se lo ponen muy difícil al jurado».

Esta nueva edición del Premio de la Crítica de Castilla y León fue fallado el pasado 27 de febrero en la ciudad de Salamanca y en anteriores ediciones habían recibido el galardón grandes escritores de la comunidad como Luciano González Egido, Antonio Gamoneda, Raúl Guerra Garrido, Óscar Esquivias, Adolfo García Ortega y Juan Manuel de Prada.