La pintura asturiana se llama Rosario

león

Primero pinta el cielo, y la inmensidad azul le va transmitiendo poco a poco el mensaje que debe reflejar en el lienzo. Se llama Rosario y nació hace casi ochenta años en Loriana, una pequeña localidad cercana a Oviedo. Estos días presenta en la galería de arte Ármaga una muestra de sus últimos trabajos. La pintura de Rosario fue descubierta por el crítico de arte naíf Anatole Jakovsky en París, y él fue el que la animó para realizar su primera exposición en la sala Bénezit, en la capital francesa, corría el año de 1965.

La pintura de esta veterana artista está llena de contrastes, de contradicciones, unas veces se muestra como seguidora de la mejor tradición impresionista y otras emula la pintura indígena de los países del tercer mundo. Rosario vive su arte con intensa bohemia, reflejando aquello que viene a su mente sin pararse a buscar interpretaciones eruditas para sus visiones. Su pintura es festiva, divertida y, especialmente, sentida. Sus cuadros son el producto directo y sin mistificaciones de sus emociones, y ningún reparo puede ponerse a su patente desprecio por las virtudes de la técnica, por su olvido de la perspectiva, por su ignorancia de la reglas de la composición. Rosario cuenta lo que siente sin encomendarse ni a Dios ni al Diablo, partiendo, eso sí, de un cielo que la ilumina en su trabajo, y de unos personajes que parecen vivir en eterna fiesta.

Rosario ha recibido muchos premios a lo largo de su ya larga existencia, pero ella recuerda con especial cariño la Medalla de Asturias, galardón que anualmente concede el Principado, y que en 2004 recayó en una generación de mujeres artistas vinculada a las vanguardias del siglo XX. Entre ellas figuraba Rosario junto a Blanca Cantalapiedra, Covadonga Romero, Mercedes Gómez, Maruja Moutas, Pepa Osorio y Amparo Cores.

Gran parte de su quehacer artístico lo ha realizado Rosario en tierras francesas, exponiendo en todas las grandes capitales del país vecino, especialmente en los lugares mágicos de la Costa Azul. De su obra dijo el doctor Vallejo Nájera: «Probablemente entre los pintores ingenuos españoles la más conocida en el ámbito internacional sea Rosario Areces. Los motivos son tres, la calidad de su obra, el haberla realizado fuera de nuestras fronteras y su apasionante biografía».

Lugar: Galería Ármaga. Alfonso V, 10

Horario: De lunes a viernes de 12.00 a 14.00 y de 18.00 a 21.00.