Diario de León
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El invento del maligno josé javier esparzA

No, no hablaremos de Dinio. Animal Channel es el título de una película de animación. Una película española, más precisamente. Y la noticia es que el Festival Internacional de Houston ha premiado a esta película con el premio Platinum Remi, que es el galardón más alto en la categoría de películas de animación para televisión y cable. ¿Por qué la ha premiado? Por su alto valor educativo.

Estando como están las cosas de la educación en España, y más en el terreno audiovisual, lo de Animal Channel debería ser para tirar cohetes. Porque, además, este es el segundo premio que consigue la película española en Houston: hace unas semanas el festival le otorgaba la medalla de oro -"nada menos-" en la categoría de cine independiente y experimental por el uso novedoso de técnicas mixtas de animación creadas por ordenador. Porque Animal Channel son dibujos, pero no es exactamente animación convencional: el flash ha permitido ahorrar costes y presentar un producto de calidad a pesar de su escaso presupuesto. Animal Channel es una película de Extra, la productora de Maite Ruiz de Austri e Iñigo Silva. La cinta prolonga trabajos previos de sus creadores y plantea un relato verdaderamente oportuno en los tiempos que corren: una historia de emprendedores en momentos de crisis, gente que se enfrenta a una situación de fracaso pero sabe sacar las consecuencias oportunas para convertir el fracaso en éxito. Todo ello, contado de una manera que cualquier niño mayor de cuatro años entenderá sin la menor dificultad (y que los adultos también deberían ver, para aprender). Este nuevo premio de Animal Channel viene muy bien para recordar una de las oceánicas lagunas de la televisión española en general: enormes carencias en materia educativa. Basta ver los contenedores infantiles de la pantalla, cada vez más orientados hacia el entretenimiento con provecho comercial (provecho para el anunciante, no para el espectador), y ni siquiera las cadenas públicas se salvan de esa deriva. En esta producción de Extra, por cierto, hay dos contribuciones de cadenas públicas autonómicas: de Extremadura y el País Vasco; ambas, todo sea dicho, no por útiles menos magras, y que en todo caso contrastan con las cifras desorbitantes que el Estado se gasta en sufragar centenares de productos perfectamente prescindibles y, muchas veces, simplemente abominables. Después de estos premios para Animal Channel , lo natural sería que alguna cadena propusiera a Extra algún proyecto concreto: si hay alguien con talento, que sabe contar historias para niños y a quien premian por su calidad técnica y su valor educativo, ¿qué otra cosa se podría esperar? Salvo que esas cosas ya no interesen en nuestra televisión.

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