La corrupción policial de Coslada llega a la Primera
La cadena pública estrena hoy el «El Bloke», una miniserie que recrea los supuestos delitos cometidos por varios agentes
Esta serie de dos capítulos muestra cómo operaban los agentes corruptos de la Policía Local.
Las miniseries triunfan en las cadenas de televisiones. Su formato, ficción basada en hechos reales, conquista a los telespectadores españoles, que se volcaron con El castigo , 23-F, el día más difícil del rey o El caso Wanninkof . Ahora, TVE vuelve a la carga con otra producción: El Bloke. Coslada Cero , inspirada en la supuesta trama de corrupción policial descubierta en la localidad madrileña.
Esta miniserie, dividida en dos capítulos que se emitirá hoy y el martes 30 de junio en prime time , ha generado una gran polémica en el municipio. El ayuntamiento pidió el pasado viernes la retirada de la serie y el ex jefe de la Policía Local, Ginés Jiménez, anunció que emprenderá acciones judiciales contra TVE y contra la productora un día después de la emisión de los capítulos.
El reparto está encabezado por José Pedro Carrión (como Ginés), Carlos Fuentes (Carlos y mano derecha del jefe de la policía local) y José Manuel Seda (Vicente). La serie combina los hechos publicados en los medios de comunicación sobre la presunta trama de corrupción policial con la ficción. Todo comienza cuando Vicente, un policía municipal de la localidad burgalesa Miranda de Ebro, que pierde a su mujer cuando intenta impedir un atraco en supermercado. Para empezar de nuevo, se traslada a Coslada para empezar una nueva vida, pero descubre la existencia de un grupo corrupto de policías locales que se autodenomina El Bloke . Intenta mantenerse al margen, pero no puede escapar a sus presiones.
Ovejas negras. «La película trata de ovejas negras, como hay en todas las profesiones, comentó Seda en respuesta a las críticas de algunos colectivos. El responsable de Mundo Ficción, productora de la serie, Melchor Miralles, consideró que no se pretende realizar «ningún juicio paralelo» sobre el caso y que que la gente «es adulta» para saber que es una ficción basada en hechos reales, no la realidad.