Entrevista
«La memoria es la amante del escritor»
Autor de ficciones soñadoras, de versos con cuerpo y alma, de imágenes llenas de sentido, Jesús Díez presentó ayer, en el torreón de La Vecilla, y dentro de las Jornadas Culturales de la villa, su nuevo libro de relatos, ilustrados por Rosa Puertas.
-”¿Qué fue primero, la imagen o la palabra?
1397058884 No puedo saltar mi sombra fue como dice en el libro del Génesis: en principium fue el verbum, la palabra. Después, con las narraciones ya escritas y leídas por la pintora Rosa Puertas, ella fue creando su propia narración de imágenes para ilustrarlo.
-”¿Conviven, dialogan, se complementan... cómo describiría la relación establecida entre ilustración y narración?
-”Todas las artes, incluso las más antagónicas, si es que alguna se puede denominar así, combinadas de una manera acertada, conviven, dialogan, se complementan. A veces chocan, parece que se rechazan, luego resulta que las chispas que saltan son estrellas y son la atracción de los contrarios. Ateniéndonos a las dos creaciones de este libro, la relación establecida entre ilustración y narración me agrada, porque cada creador ha sabido hilvanar su hilo. Por una parte los gestos del verbum , de la palabra; mientras que el otro ha sabido encender la rueca con el hilo narrativo del color, con símbolos, formas, matices descriptivos, texturas gráficas.
-”La memoria, lo táctil, lo sonoro, lo matérico... sus cuentos casi pueden olerse, tocarse. ¿Es algo premeditadamente buscado?
-”Mis narraciones son un retrato de mí mismo. Todos los sentidos del ser humano, el tacto, el gusto, el olfato, el oído, la mirada, son cómplices de una comparsa llamada memoria, que el escritor considera como una de sus más necesarias amantes. Yo no la busco, pero ella me llama recurrente, no me puedo resistir a sus cantos y también a sus silencios. El escenario de mis cuentos es un mundo cercano y un vínculo con el lugar y las gentes donde nací, el valle del Curueño.
-”¿Qué es, para usted, la memoria?
-”Si como escritor soy un árbol trasplantado de lugar, la memoria son mis raíces, donde cruje el recuerdo como pan recién salido del horno. En mi literatura convergen realidad e imaginación, y ésta no es más que la memoria fermentada. Por eso las narraciones de este libro son autorretratos salvados del abandono, donde los personajes son presencias contra el olvido, de lo soñado a lo vivido, de lo hablado a lo recordado.
-”¿Quiénes son tus autores favoritos?
-”¡Hay tanto que leer y que admirar! Los más cercanos al río que me baña, y al paisaje de la memoria, Jesús Fernández Santos, el recientemente fallecido y querido Antonio Pereira, Luis Mateo Díez, José María Merino. Hay otros autores que son el principio y a los que siempre vuelvo: Chejov, Kafka, Borges, Onetti, Miguel Torga, John Berger, Tabucchi, Thomas Bernhard, R. Carver-¦