IU pide al Ayuntamiento que haga públicas las cuentas de Llionpedia

Izquierda Unida de León solicitó ayer a la Concejalía de Hacienda que se hagan públicas y se envíen a la Fiscalía las facturas económicas existentes en el Ayuntamiento para la compra y mantenimiento del dominio «Llionpedia».

A juicio de su coordinador local, Santiago Ordóñez, «el cese de Abel Pardo no puede esperar» y recordó que son personas precisamente defensoras de la cultura leonesa quienes le han denunciado, «por tanto miente cuando asegura que esta es una campaña contra lo leonés; es una campaña contra unos contenidos que tienen cobertura política en un concejal con relaciones demostradas con partidos xenófobos y racistas de Europa».

Tal y como expresó Ordóñez, «los datos económicos exigidos pueden ser relevantes para la investigación penal en curso y pueden dejar claro lo que el concejal Pardo ya no se atreve a negar, que la Llionpedia está controlada por la Concejalía de Cultura Leonesa: Abel Pardo ha pasado de negar la mayor y afirmar que era una wiki abierta sin control político a defenderla como propia afirmando que seguirá abierta como otra de las medidas políticas de su gestión municipal».

Opiniones acientíficas. «De hecho, las contradicciones del responsable de este escándalo se extienden a otras afirmaciones, como negar que existiesen contenidos de rasgo revisionista contra el Holocausto y luego admitirlos e intentar hacerlos pasar como teoría alternativas cuando no son más que opiniones acientíficas creadas por la extrema derecha europea y americana, que en el caso de la Llionpedia no sólo niegan el Holocausto como solución final sino que justifican la labor de los responsables nazis sentenciados en Nuremberg, negando su participación».

Para IU, la justificación del genocidio es delito: «Existe un informe pormenorizado de las modificaciones realizadas por Auslli a las entradas iniciales del administrador Adrianu sobre el Holocausto, y que demuestran claramente la intencionalidad de adaptar los contenidos a una ideología muy concreta. «La relación entre los contenidos abominables admitidos e incorporados por los administradores de la página definen una responsabilidad penal en la que puede estar implicado el Ayuntamiento si se demuestra que la Llionpedia ha sido financiada íntegramente por el Consistorio. Sin embargo, las confesiones públicas del concejal admitiendo la relación entre la enciclopedia y su gestión política, dejan en evidencia que la exigencia de cese al alcalde está plenamente justificada», continuó, señalando que, hasta ahora, las medidas tomadas por el consistorio como respuesta rápida eran correctas, «pero la lentitud en dirimir las responsabilidades políticas pueden salpicar fuera de la Coincejalía responsable».

«El revisionismo no es una teoría contrastable ni puede aparecer junto a realidades demostradas. Tan sólo tienen utilidad si se quieren sembrar dudas. El idioma en que se escriba es lo de menos», concluye.