Ganar o ganar

Sin afanes | martín

Juega la Cultural en el Reino de León un partido muy importante, incluso yo diría que vital para mantener la categoría. Un partido en el que es imprescindible la victoria para iniciar una marcha ascendente que saque al equipo de los lugares peligrosos de la clasificación. Metidos ya en la segunda vuelta del calendario, cuando es imprescindible hacer camino al andar, los tres puntos en juego tienen un valor incalculable con visión de futuro. Con la victoria ante el Izarra refrendada por otra frente al Montañeros, en el partido pendiente, el impulso vertical hacia arriba se llevaría al equipo a ocupar una posición relativamente tranquila, sobre la que aumentar el sólido edificio de la permanencia. Nada digamos si el impulso moral de ambos triunfos lleva a lograr algo positivo en el seguimiento desplazamiento a Lemona; porque luego llegarán al Reino de León sucesivamente dos equipos como el Alavés y el Osasuna B que van a dar trabajo y fatigas para seguir sumando puntos.

Conscientes de la importancia del encuentro frente al Izarra, desde la directiva se ha hecho una campaña con la finalidad de llevar espectadores al Estadio, con el fin de que los jugadores se sientan arropados, llevados en volandas por las voces de aliento, carburante y aditivo importantes para revolucionar el motor del equipo. Nada nuevo por cierto; porque ya desde hace largo tiempo, directivas de equipos de otros deportes se han ocupado y preocupado de llevar, particularmente a los niños, a sus recintos deportivos. Sin duda con doble objetivo: despertar con sus voces de aliento, a los escépticos habituales, más el añadido importante de crear afición. Ítem más, los niños suelen «arrastrar» a padres y abuelos acompañándolos; el resultado se hace doble, presencia y continuación. Levar espectadores al Estado, hacer afición-¦ Pero convengamos que la afición no hace el equipo y sí el equipo hace afición. Y aquí entran primero los resultados y luego el espectáculo; los buenos resultados, los goles. Sus «majestad» el gol, principio y fin del evento futbolero. Aquí está el quid de la cuestión. Sin goles no hay victorias y sin victorias no se suman tres puntos, devaluando los empates que solo aportan uno. Es un secreto a voces que la Cultural tiene una total dependencia del jugador Jito, dependencia del equipo para llevar balones a la red. Evidencia la carencia, se hace necesidad buscar y encontrar otro jugador que complemente la aportación goleadora.