La enfermería blanquiazul, a punto de vaciarse
El rosario de lesiones que acumula la Ponferradina esta temporada parece que está a punto de darle un respiro al conjunto de José Carlos Granero. En la jornada de ayer, segunda de descanso para los que jugaron en Lezama, el segundo técnico blanquiazul, Toñín, llevó a cabo una sesión de trabajo con los lesionados Berodia y Nacho, así como con David Álvarez, que no viajó a Bilbao, y Mandi, que apenas jugó un par de minutos ante el Bilbao Athletic.
La evolución de la lesión de Nacho es favorable, y el centrocampista asturiano podría estar disponible para el encuentro de este domingo ante el Sestao River. Por su parte, Gerardo Berodia tiene una contractura en el cuádriceps que le sigue mantiendo entre algodones y como duda para el fin de semana.
Valle, en Santander. Por su parte, Jonatan Valle se encontraba ayer en tierras cántabras para tratarse de la microrrotura que sufre en un gemelo. El delantero estará hoy en Ponferrada para analizar el estado de su lesión y saber si puede volver al equipo el domingo.
El resto de la plantilla volverá a los entrenamientos esta tarde a las cinco en el Colomán Trabado y a partir del miércoles se retomarán las sesiones matinales, todos los días, a las diez de la mañana.