Enseñar, aprender, vivir y contar la lucha

Escuelas de lucha y futuro: «Hemos querido plantearnos a través del documental qué futuro tienen los aluches». Son palabras de Tomás Martínez.

De las primeras escenas referidas, en las que la historia de la lucha se disfruta en el entrañable sabor (incluso con toda su genial sorna) de los de Carbajosa, pasando por las que muestran el sentir de grandes protagonistas, luchadores, como El Divino de Campohermoso («Me gusta hacer lucha. El mayor honor es poder luchar») a las finales en las que el futuro es representado por los hermanos Balbuena, Manuel y Jimena. Para ellos, para los que comienzan sus vivencias de los aluches, es difícil entender que muchos de sus compañeros en el colegio no se interesen por la lucha leonesa, «aunque se la quiera contar y enseñar el profesor de Educación Física».

Para muchos leoneses, para muchas otras gentes más allá de las leonesas comarcas de Ribera y Montaña, lo que cuentan estas Historias de los aluches puede constituir una buena oportunidad para conocer, entablar debate, avanzar en mejora, de lo que es valor de nuestras gentes. «Y cuando nosotros faltemos -dice María- el documental seguirá contando la lucha».