La grada acabó haciendo la ola y cantando «¡Qué viva España!»
Lo mejor llegó al final. Quizás por eso el recuerdo del choque dejó buen sabor de boca. En los últimos 20 minutos España anotó dos goles y tuvo algunas ocasiones muy buenas para marcar más. Quizás por eso el público, que al final fue más del que se preveía poco antes de iniciarse el choque (casi como en un partido de la Deportiva) acabó celebrando el triunfo con la ola y la canción de Manolo Escobar.