Otro revolcón ante el Barcelona (27-33)

De cididamente aquel empate que cosechó el Reale Ademar en el Palau en la primera vuelta de la liga hirió profundamente el amor propio de los azulgrana. De hecho hizo mucho más que eso: allanó el camino del Ciudad Real en dirección al título de liga. Tal vez por eso los azulgrana se la juraron a los leoneses. Y a fe que han cumplido. En los cuatro enfrentamientos siguientes que han tenido esta campaña: dos de Champions, la final de la Copa del Rey y el de ayer en liga, han ganado siempre.

Ayer no se rompió la maldición. Pese a que Pascual no utilizó a toda su artillería el Barça mandó en el marcador del minuto uno dal sesenta gracias a la tripleta mágica formada por Juanín (10 goles), Sarmiento (5 dianas) y Hansen con cuatro.

Y es que las cosas ya pintaron mal desde el arranque. El 1-4 de inicio hizo aparecer los macabros fantasmas del partido de Champions cuando el Barcelona apabulló al Ademar en el Palacio. El brazo de Bicanic (tres dianas en diez minutos) los alejó pero no los enterró del todo.

El ataque posicional se estaba resolviendo bien pero al equipo le hacía falta un plus en defensa y en la portería, defendida ayer de inicio por un Vicente Álamo que se lo ganó en Rusia. Faltaba más agresividad y más intensidad atrás. Yeso que el Barça vivía básicamente de un inspirado Juanín y de sus lanzamientos de penalti (tres de tres) más que de su juego.

Pero el Reale Ademar no acababa de cogerle el ritmo al partido. Ribera hace cambios en la defensa 6-0. Varía a la 5-1 con José Mario de adelantado pero se llega al minuto veinte con cuatro abajo: 8-12. En ese momento el técnico pide tiempo muerto para arreglar las cosas pero el panorama no cambia. Incluso empeora.

La defensa leonesa deja demasiados huecos. Tantos que los azulgrana se van al descanso con 19 dianas en su casillero por 14 el Reale Ademar. Y lo malo es que el equipo volvió a dar en ocasiones esa imagen de desidia a la hora de hacer el balance defensivo. Unos sí corren a tope y otros no.

En la segunda mitad, Ribera prescinde de inicio de Doder en el central y juega en ese puesto con el lateral ruso Chernov lo que queda de partido. Y la cosa funciona. Un parcial de 4-0 pone de nuevo a los leoneses en el partido. 18-19 en el minuto seis. Es un equipo atípico pero da resultado. La defensa y Alilovic abortan hasta cuatro ataques seguidos de los azulgrana.

Las sensaciones cambian pero la intensidad en defensa trae consigo varias exclusiones seguidas que hacen que el Barça juege en superioridad durante muchos minutos. Y son los minutos decisivos, donde el Ademar parece cercano a remontar.

Los de Ribera tienen varias oportunidades para ajustar aún más el marcador pero no lo consiguen. Bicanic siendo viendo puerta con facilidad.

Juanín continúa con su recital particular. Lleva diez tantos y a él se agarra el Barça para seguir mandando en el partido. A él y a un Rutenka que saliendo en los minutos finales rubrica la victoria azulgrana.