Salva Calvo, rey en Australia

Primero fue la Race the Planet de Vietnam en el 2008, el año pasado te tocó el turno a Namibia y en el presente 2010 ha sido Australia. En todas estas carreras, consideradas como unas de las más difíciles del mundo, el atleta cepedano Salva Calvo ha logrado inscribir su nombre con letras de oro como triunfador. Precisamente en la última de ellas el ultramaratoniano de Brimeda lograba un triunfo incontestable certificado en la jornada del sábado después de seis intentas jornadas en las que su superioridad fue tal que el segundo clasificado, el italiano Francesco Galanzino, entraba en la línea de meta 36 minutos y 21 segundos de retraso. Más tarde lo hacía la norteamericana Lia Farley (cediendo 1 hora, 9 minutos y 18 segundos) mientras que el resto de rivales perdían ya un mundo respecto a un Salva Calvo que nuevamente corroboró su condición de referente mundial en pruebas de larga distancia.

Y es que, salvo en la última jornada en la que el atleta leonés se limitó a contemporizar y no arriesgar y en la que sólo le superaba el holandés afincado en Australia Van Wijngaarden, en el resto el cepedano marcaba el mejor tiempo. Ya en la primera jornada con salida en Kunnunurra Salva dejaba claras sus intenciones dejando el crono en 5:16.32, 4-™40 minutos inferior al de Wijngaarden y 6-™24 respecto a Lia Farley. La segunda jornada de competición tampoco varió los parámetros. El leonés volvió a ser el mejor aunque en esta ocasión con cambios en sus perseguidores. Así, Salva lograba cruzar la línea de meta tras un día terrorífico en cuanto a adversidades climatológicas y orográficas aventajando en 12 minutos y tres segundos al surcoreano Ahn Byeung y en 16 minutos y tres segundos al italiano Galanzino, a la postre segundo en el podio final, y a Farley.

Nuevamente en el ecuador de la prueba Salva volvía a firmar el mejor crono aunque en esta tercera etapa y para evitar riesgos lo hacía acompañado de Galanzino, Farley Ahn Byeung. Restaban otras tres etapas a cual más complicada y el cepedano ya contaba con una renta cómoda aunque no definitiva ya que estas carreras, dada su dificultad extrema, tienen numerosas trampas que pueden llevar a cualquier atleta no sólo a c eder un tiempo enorme sino obligarles a la retirada. Eso lo sabía el atleta de Brimeda que en la cuarta entrega volvía a dar un golpe sobre la mesa con su entrada en meta con el mejor registro. Sólo pudieron aguantarle en esta ocasión Galanzino y Ahn Byeung. Pero la ambición de Calvo no quedaba ahí. En la etapa maratón que el cepedano lograba completar en 12 horas 54 minutos y 30 segundos apenas dos rivales lograron aguantar su ritmo, Galanzino y Farley.

El triunfo era ya un hecho porque en la última etapa, de apenas 24 minutos, su ventaja estratosférica hacía imposible cualquier sorpresa. Salva Calvo era el brillante ganador de la Race the Planet en Australia y nadie podía arrebatarle el orgullo de inscribir su nombre como rey de la prueba, para orgullo propio, de León y en especial de sus paisanos cepe danos de Brimeda.