Lucha Leonesa Liga de Verano de Base y Juvenil
En la cuna, la lucha manda sobre el cielo
El cielo respetó el segundo corro de la Liga de Verano de Base y Juvenil
El Pando aguantó hasta la conclusión del corro; poco después costaba creer que hubiera nubes bajando hacia el Cea, que todo el cielo pareció caer sobre Prioro. «Las que vienen retorcidas son las peores», decía Cruz, pastor de Corniedo. «Con seis años -contaba- salí ya de vecero, y cuando las ovejas se quedaban al salir de la majada, malo: venía agua» . Y dicen que se quedaron ellas quietinas al salir del Corral de los Lobos.
La Fiesta de la Trashumancia contó con el segundo corro de la Liga de Verano de lucha de base y juvenil como uno de sus especiales atractivos. Lo fue.
Noventa y dos luchadores inscritos, con luche de once y media a dos de la tarde. Arbitraron Juan Pablo Tejerina y Avelino García ante un público numeroso, que alternaba entre la grada y otros atractivos de la jornada.
Muricio Gutiérrez y Adrián Gardeazabal lograron el triunfo en las categorías de prebenjamín. Jorge Fernández, Raúl Balbuena y Aurora Candelas, lo hacían en benjamines. Entre los veinticinco de alevines (los más numerosos) eran Jaime Prado, Alberto J. Prieto y Pedro Alvarado los vencedores. Alberto Fernández, Agustín Alvarado y Samuel Sánchez en infantiles; Víctor Justel, Rodrigo Fuentes y Vicente Alvarado en cadetes; Víctor Díez, Jonathan Velasco y Alejandro prieto en juveniles.
Entre lo más significado, combates de los cadetes Víctor Justel y Ángel Paredes (ante los de casa), así como el de Rodrigo Fuentes (merece toda la atención) con Rubén Fierro.