Un partido de locos (4-3)
El Sevilla se lleva con sufrimiento un partido ante el Athletic que ganaba por un claro 3-0
El Sevilla se llevó con sufrimiento un partido ante el Athletic que controlaba con un 3-0 a los 62 minutos, pero que enloqueció al jugar los locales en inferioridad por la expulsión de Fernando Navarro y acortar distancias el internacional Fernando Llorente y ponerlo con un 3-2 y mucho tiempo por delante. Al final 4-3.
La locura continuó hasta el final, con el segundo penalti transformado por el malí Frederic Kanouté y con el 4-3 de Igor Gabilondo cuando se moría el choque.
Era una partido en el que ambos equipos buscaban una importante victoria para confirmar sus aspiraciones de luchar por puestos europeos y pronto se vio que el conjunto vizcaíno no iba a especular con el resultado, pues su técnico, Joaquín Caparrós, dispuso de un once ofensivo con Gaizka Toquero y Llorente incrustados entre los centrales sevillistas y con Susaeta y Muniain con mucha profundidad por los extremos.
Fue el equipo visitante el que tomó el mando desde el pitido inicial y asedió la meta de Andrés Palop, pero el Sevilla definió mucho mejor.