El Camino de Santiago se tiñe de épica

El tramo del Camino de Santiago que une Astorga con Ponferrada se llenó en la mañana de ayer de corredores dispuestos a cubrir lo más rápido posible los sesenta kilómetros que separan ambas localidades. No se trataba de peregrinos con prisa, sino de una nueva prueba atlética que viene a engrosar la larga lista de carreras que salpican el calendario en la provincia de León: la Carrera de Relevos Camino de Santiago Astorga-Ponferrada.

La carrera, organizada por el Club Corredores de Fabero-Sport Life y la Diputación de León, con la colaboración de los ayuntamientos de Astorga y Ponferrada, contaba con cerca de seiscientos atletas inscritos, tanto de forma individual como por equipos.

La prueba, de relevos, constaba de cuatro etapas de diferente longitud y dificultad, comenzando con una media maratón (21,1 kilómetros) entre Astorga y Rabanal del Camino. Este primer relevo, en consante pendiente hacia arriba, se lo adjudicó José Luis Capitán en la categoría masculina, con un tiempo de 1 hora y 16 minutos, y Nuria Gómez en la femenina, con una marca de 1:47:45. Por si el trazado no fuera bastante complicado de por sí, el viento de cara y una fina lluvia aparecieron para dificultar aún más las cosas a los corredores.

El asunto no mejoró en la segunda etapa del recorrido, la que unía Rabanal del Camino con el Acebo. Casi 18 kilómetros, con subida a Foncebadón incluida para dejar atrás la Maragatería y entrar de lleno en tierras bercianas. Aquí el tiempo les tenía reservadas nuevas sorpresas a los participantes, y aunque desapareció el viento, la lluvia arreció y la niebla hizo acto de presencia. El primero en llegar al Acebo fue Martín Álvarez, que paró el cronómetro en 1:08:30, mientras que en categoría femenina, la victoria parcial de la etapa fue para Fabia Codalli, que invirtió 1:33:26 en completar el recorrido.

El agua se convirtió desde entonces en compañera inseparable de los corredores, que encararon con el mejor ánimo posible la tercera etapa, entre el Acebo y Molinaseca. Diez kilómetros de constante descenso que tuvieron como ganadores a Roberto Alaiz, con una marca de 26 minutos y 50 segundos, y Teresa Bordal, que tardó 37 minutos y 46 segundos en completar este tramo.

Desde allí, ya sólo restaban diez kilómetros más hasta Ponferrada, cuyas calles recorrió la prueba antes de alcanzar la meta definitiva, situada junto al estadio de fútbol del Toralín. En este último tramo la victoria parcial correspondió a Alejandro Martínez, con un tiempo de 30 minutos y 29 segundos, y Noemí Villa, que paró el reloj en 36 minutos exactos.

En la clasificación final por equipos, en la categoría masculina la victoria fue para el Aranda-Piloña, compuesto por José Luis Capitán, Martín Álvarez, Juan Carlos Rodríguez y Vicente Capitán. En total, invirtieron 3 horas, 22 minutos y 15 segundos en completar los cuatro relevos, nueve minutos menos que el segundo equipo, que respondía al nombre de «Somos unos cebados». Terceros fueron los componentes del Atocha Ocho, con un tiempo de 3 horas y 35 minutos.

En la categoría femenina, la victoria fue para el equipo 4 Pipas, formado por Nuria Gómez, Fabia Codalli, Consuelo Alonso y Eloina Perandones, con un tiempo total de 4 horas, 45 minutos y 50 segundos.

Por último, en la categoría de equipos mixtos, el primer puesto fue para el Correcaminos del Duero, con una marca de 3:53:28. El grupo estaba integrado por José María Pinto, Roberto González, Jesús Alberto Vicente y María Díez.

En total, 365 corredores tomaron parte en esta primera edición de la prueba por relevos entre Astorga y Ponferrada.