La Cultural tendrá que elegir de inmediato nuevo consejo
El Juzgado de lo Mercantil de León indica en su sentencia, a parte de la declaración de la culpabilidad del concurso de acreedores a la Cultural y Deportiva Leonesa SAD: «Declaro como personas afectadas por dicha calificación a Domingo Cueto Acevedo, Dionisio Elías Prieto, Carlos Javier Emperador Franco, Antonio García de Celis y Alfredo Martínez Pérez, a quienes condeno a la sanción de inhabilitación para administrar bienes ajenos durante 2 años, así como para representar o administrar a cualquier persona durante el mismo período, y a la pérdida de cualquier derecho que tuvieran como acreedores concursales o de la masa. Los administradores inhabilitados cesarán en sus cargos, si bien previamente deberán convocar de forma inmediata una junta para el nombramiento de quienes hayan de cubrir sus vacantes».
El Juzgado de lo Mercantil es muy claro al respecto y los actuales dirigentes de la Cultural y Deportiva Leonesa SAD tendrán que reunirse cuanto antes (todo está señalado para que lo hagan hoy en las dependencias de la entidad deportiva) y fijen una fecha para reunir a los accionistas de la plataforma que domina el accionariado de la Cultural. El único propósito es el de acordar un grupo de accionistas que se ocupen de la dirección de la sociedad anónima deportiva, tras la declaración del Juzgado de inhabilitar a los cinco señalados para administrar bienes ajenos.
Dentro de los que componen la sociedad Promociones del Fútbol de León hay accionistas que poseen un buen cartel para suplir a los cinco inhabilitados. Uno de los que cuenta con la confianza de un buen número de socios de Profutle es Santiago de la Riva, que en la actualidad preside el Huracán Z, que milita en el grupo octavo de la Tercera División. Tiene un buen cartel entre los que ostentan el accionariado de la plataforma, por lo que algunos apuntaban en esa dirección nada más conocerse la sentencia del Juzgado de lo Mercantil.
Los próximos días serán intensos para la convocatoria de la junta general de Profutle, en primer lugar, para después elegir al nuevo delfín que lleve las riendas de la Cultural, que de lo contrario caminaría a la deriva, porque se encuentra endeudada y con una ampliación de capital pendiente por un valor de 1,2 millones de euros (200 millones de pesetas), que significan la única salvación de la Cultural, dado que tiene que afrontar los pagos establecidos con el convenio de acreedores aprobado en su día, a parte de las deudas que tiene contraídas con la Seguridad Social, que entran dentro de los créditos de privilegio, que debe cumplir y que ascienden a los 371.000 euros (alrededor de los 62 millones de pesetas). La junta será lo primero.