Otra muesca para el zurrón

Baloncesto León cerró el 2010 con triunfo y espera estrenar el 2011 con victoria. Ese propósito es el que intentará aplicar esta noche (20.45 horas) en la pista del Adepal Alcázar, un enemigo poderoso ante su público que ya sabe lo que es tumbar a equipos de primera fila como el Cáceres 2017, Autocid Burgos, Melilla e Isla de Tenerife. En esta ocasión los manchegos van a encontrarse con un Baloncesto León en forma que, sentado en la cuarta posición pero con el mismo bagaje que el tercero, pujará por llevarse el gato al agua y con ello matar varios pájaros de un tiro. El primero seguir una jornada más en los puestos de privilegio de la tabla, el segundo acabar con una racha de cinco encuentros como visitante en los que no ha «mojado» y el tercero, asegurar ya a falta de toda una segunda vuelta, el primer gran reto, la permanencia.

A priori los leoneses parten como favoritos para doblegar a un recién llegado a la LEB-Oro que, precisamente, afrontará el choque con una novedad en sus filas, la del alero norteamericano Danny Brown que llega como reemplazo de Dexter Lyons tras no cumplir esta segundo las expectativas depositadas por la entidad. Los de De Grado son conscientes que todo dependerá de ellos si quieren apuntarse el último envite de la primera vuelta. Asegurar el rebote y lograr porcentajes altos en el lanzamiento a canasta que posibiliten dígitos altos en el marcador serán vitales para que León sume el decimosegundo triunfo de la temporada igualando precisamente el 12-5 que establecía en la temporada 2006-2007, la del último ascenso a la ACB.

El primer cometido será hacerse dueños de la pintura. Y eso pasa por dominar el juego interior. Ahí es donde Seawright tendrá mucho que decir lo mismo que sus compañeros Jorge García, Albert Fontet y Javier Múgica. A priori este cuarteto debe hacer valer sus galones frente a un rival que cuenta como principal argumento en esta faceta del juego a Kiril Wachsmann. Todo un veterano como Ward, Virgil, Wright y Balmón aparecen también como huesos duros de roer en mayor medida por el perfecto conocimiento de todos ellos que repiten de la pasada temporada que por la calidad que en cierta medida favorece a los leoneses.

También será fundamental ganar la batalla en el juego exterior donde el pulso va a resultar tremendamente igualado. El dominicano Manny Quezada, que frente al Iruña Navarra volvía a mostrar sus grandes virtudes después de varias jornadas con un rendimiento irregular, aparece como la gran referencia de los de De Grado que con la ya consabida y duradera baja de Rocchia, completa el arsenal desde el perímetro con Julio González, Fernández Riol y en ciertos momentos Javier Múgica cuya buena mano desde la media distancia le convierte en un ayuda fundamental para intentar desatascar situaciones comprometidas. Una de ellas puede darse esta noche en el Pabellón «Antonio Díaz Miguel» frente al Adepal que en esa parcela de juego cuenta con Robles y Almazán como principales espadas y con el refuerzo del recién llegado Brown. La tercera situación de juego con trascendencia en el resultado final será la que se viva en la dirección de juego. Bernabé y Calvo deben bastarse para neutralizar a Frutos y a todo un veterano con cuerda todavía como Iván Corrales.

Estilos antagónicos. Para Javier de Grado, mantener el nivel mostrado hasta ahora en la liga es una premisa que sin duda alguna debe reportarle el éxito con un rival qu e a diferencia de los leoneses se mueve mejor con marcadores bajos. León, por su parte, transita siempre con cifras elevadas que le confieren un alto grado de triunfos. Correr y aplicar sobre la pista un juego alegre es vital pero también asegurar la defensa, evitando además que las pérdidas se conviertan en un arma de doble filo. Todo para alcanzar el objetivo que no es otro que seguir sumando en una temporada en la que Baloncesto León está dejando claro que la garra y la entrega son dos de sus gran des activos.