Desembarco árabe

El aterrizaje de los árabes en el fútbol español se consolida. La Cultural camina en esa dirección, después de las negociaciones abiertas desde hace algunos días. Esta semana es decisiva para cerrar la operación que salve a la Cultural de la cruda realidad por la que transita, tras dilapidar en menos de diez años un capital extraordinario, fijado en más de seis millones de euros hasta antes de la aprobación del convenio de acreedores.

El club leonés está abocado a la liquidación, de no cristalizar la operación abierta con el capital procedente de los Emiratos Árabes. Así lo expone el orden del día de la Junta General Extrordinaria de accionistas de la plataforma Profutle, prevista para el día 21 de febrero, en su punto uno. Una de las decisiones a tomar, si no hay una salida mejor, y no la hay, es la disolución de la sociedad.

El desembarco de los petrodolares en la Cultural ha sido recibido como el maná para la afición culturalista y para los componentes de la plantilla leonesa. Su entrenador, Alberto Monteagudo, ejerció de psicólogo antes de emprender el viaje hacia Eibar. Expuso a los jugadores la situación e informó de la existencia de un grupo inversor árabe, al leer nada más levantarse y antes de partir hacia tierras vascas lo anunciado por este periódico. Fue un acicate más para un grupo de futbolistas que pasan por una situación miserable desde hace más de tres meses.

El fútbol leonés no es ajeno a lo que acontece en el nacional e internacional. La inversión en los clubes de fútbol no sólo afecta a los grandes como el Manchester City o como sucede en la mejor liga de España con el Málaga. En la tercera categoría del fútbol español, hay clubes con potencial e infraestructuras deportivas para atraer a inversores de los países emergentes.

La Cultural se agarra a la salvación de los Emiratos... leoneses.