La normativa cambia

La Deportiva juega hoy la segunda semifinal de la Copa Castilla y León, una competición que va camino de emular a la Copa Diputación de León por el despropósito cometido mediada la misma. Las normas no son iguales para todos los partidos y ocurre algo parecido a lo de la competición provincial, pero justo al contrario. En la referida Copa Diputación se celebró la fase previa con unas normas de puntuación que se sacó de la manga el organismo provincial, normas contrarias a la reglamentación futbolística, aduciendo que era su competición y que las normas las dictaba ella. O sea, como ese dicho de «en mi casa jugamos al parchís de esta manera». Aunque el Atlético Bembibre debía haber jugado el triangular final, se le regaló el pase al Huracán Z. Ahora se juega el Burgos CF-Deportiva de Copa Castilla y León. Y lo que valía en la pasada edición y en todos los demás partidos de la actual, no cuenta ahora. La Federación Castellano y Leonesa de Fútbol ha querido otorgar a su competición un carácter de oficialidad del que carece, o sea, no es una competición oficial. Tras una consulta de la Deportiva, se ha comunicado a los clubes que en todo momento han de tener siete jugadores de sus primeras plantillas en el campo y que sólo se podrán realizar cinco cambios. Claudio Barragán tenía pensado llevar medio equipo del filial y jugar de inicio con un buen puñado de jugadores de la cantera.

Ejemplos de sobra. La Deportiva jugó en verano en Zamora y en León la fase previa y en la misma presentó un equipo diferente en cada período. En León Carlos Granero utilizó 21 jugadores y entre ellos estaba Ivi Vales, al que ahora no puede llevar por ser mayor de 23 años, igual que a Roberto Puente, que en principio también iba a ir a Burgos. Y en Zamora llegaron a jugar 22 jugadores.

En la edición del año pasado, El Burgos CF perdió un partido de la primera fase en Aranda de Duero por 9-0. El entonces técnico albinegro, Javier Álvarez de los Mozos, utilizó en ese choque hasta a 20 juveniles, ya que el día siguiente jugaban los futbolistas del primer equipo un amistoso en Laredo. Pero hay ejemplos más cercanos. El Deportiva-Cultural de esa misma primera edición lo jugaron las plantillas filiales y en Compostilla. Es más, la Cultural no desplazó ni a su técnico. La Ponferradina dio minutos entonces a Nino y Nacho, que salían de sendas lesiones y que marcaron.

Total, que la competición pierde con este tipo de «novedades» la poca seriedad que de por sí ya le conceden los equipos que la disputan y los propios aficionados. Y Claudio tendrá que utilizar a jugadores a los que quizás no tenía previsto poner a jugar o sí, pero menos minutos.