fútbol. primera división
Mourinho no se fía de Riazor
El Dépor quiere recuperar el maleficio que el Madrid rompió el año pasado
El portugués José Mourinho, durante su comparecencia en sala de prensa.
El Deportivo de La Coruña necesita recuperar el maleficio que el Real Madrid rompió la temporada pasada en el estadio de Riazor, para dar hoy (22.00 horas, La Sexta) un paso firme en su camino hacia la permanencia en Primera división y frenar la reacción madridista en la lucha por el título.
Con una genialidad que será siempre recordada de José María Gutiérrez, -˜Guti-™, un taconazo de asistencia a Karim Benzema cuando se había plantado en un mano a mano con Dani Aranbubía, el Real Madrid puso fin la pasada temporada a una racha de más de 18 años sin ganar en sus visitas a Riazor, donde no vencía desde noviembre de 1991.
Por fin jugadores como Raúl González, Guti o Iker Casillas ganaron en un campo gafe, en el que el Deportivo pretende iniciar una nueva maldición para el Real Madrid con el objetivo de sumar tres puntos que le refuercen en la clasificación y el estado anímico.
El técnico blanquiazul, Miguel Ángel Lotina, considera que una victoria supondría la permanencia, no matemáticamente, pero sí por la inyección moral que daría a sus jugadores, que en la primera vuelta cayeron al último puesto de la tabla cuando les goleó (6-1) el Madrid en el Bernabéu.
Las lesiones, como toda la temporada, no han dado respiro al Deportivo en los últimos días, en los que ha perdido a Xisco, Manuel Pablo y, en la víspera del partido, a Juan Carlos Valerón, que iba a entrar en la convocatoria y podría haber tenido alguna opción de ser titular. En el lado positivo, Lotina recupera al mexicano Andrés Guardado
Mourinho debe decidir si evita riesgos con Cristiano o accede a los deseos de jugar todo del portugués. Cuenta en el centro del campo con la ausencia por lesión de Sami Khedira, por lo que será -˜Lass-™ Diarra la pareja de Xabi Alonso.
Mou critica los horarios. José Mourinho compareció en rueda de prensa y volvió a dejar constancia de algunas de los aspectos organizativos de la Liga que no le gustan. Habló de los horarios, y se quejó del hecho de tener que jugar dos partidos seguidos (Deportivo y Málaga) a las 22.00 horas: «Yo hablo, hablo y hablo, pero no tengo fuerza ni poder de decisión. Pero no son todos los que se quejan. Algunos tienen la vida más fácil, más estructurada, parece que escogen a qué hora quieren jugar. Son privilegios que nosotros no tenemos».
«A lo mejor les hago reír, porque son ellos los que tienen el poder y los que deciden -”continuó-”. No vale la pena perder mucho tiempo, porque las cosas están bastante claras», apuntó.