El cuarto peldaño como reto

Baloncesto León sólo piensa en el cuarto peldaño de la liga. Y para lograrlo es obligado «pescar» en el feudo del Iruña Navarra (20.30 horas), un escenario en el que esta liga han caído varios pesos pesados y en el que los de Javier de Grado tienen en su mano sellar una posición de privilegio que no sólo les permita afrontar un enemigo más accesible el primer envite del play-off de ascenso, también evitar al segundo de la competición si logra hacerse un hueco en las semifinales.

De Grado no quiere relajación que pueda ralentizar la buena marcha del equipo y por eso ha incidido en mantener una tensión acorde a un choque en el que a priori los leoneses parten con ventaja. Eso si son capaces de aplicar sobre la pista sus señas de identidad que capitalizan la defensa, las transiciones rápidas y un marcador elevado. Por eso será vital hacerse fuertes en la pintura. León cuenta con argumentos suficientes para ello. En gran medida porque dispone de cuatro jugadores de empaque capaces de llevar el choque a su terreno. Seawright, Jorge García, Albert Fontet y Javier Múgica deben imponer sus galones a uno adversario que cuenta como mejor aval al ex del Burgos Jason Blair al que acompañan en la pintura Chris Lee, Robert Joseph y Txomin López.

A priori la balanza debe decantarse del lado visitante lo mismo que la del juego exterior donde la baja de Iñaki Narros deja diezmada la capacidad ofensiva de los de Ángel Jareño. El entrenador del Iruña sólo puede disponer de Adrián García, Labiano y Roma Bas. Precisamente este último constituye la mayor amenaza para los intereses de los leoneses en los que Manny Quezada, que parece recuperar su mejor tono, vuelve a aparecer como un jugador determinante. La ayuda de Julio González, ya recuperado de sus problemas físicos y de Fernández Riol se erige en decisiva. Además, después de más de tres meses ausente debido a una lesión en su hombro derecho, león volverá a contar con uno de sus jugadores más consistentes, el escolta italo-argentino Franco Rocchia que, según discurra el encuentro, puede disponer de algunos minutos con vistas a coger la forma adecuada para ayudar plenamente en el play-off.

El tercer vértice sobre el que se asentará la puja por el triunfo se focaliza en la dirección del juego. Y ahí nuevamente los de De Grado cuentan con ventaja. Eso sí, deben aplicarla sobre una pista que en esta temporada se ha cobrado ya muchas víctimas deportivas. Juanjo Bernabé y Jorge Calvo deben bastarse para neutralizar el ritmo que intentarán imprimir tanto Iñaki Sanz como Chema González, este segundo también peligroso debido a su eficaz porcentaje en el lanzamiento a canasta.

Ganar es el reto. Eso sí, de los dos equipos aunque quizás el premio mayor puede caer del lado de Baloncesto León con la cuarta plaza aún por asegurar frente a la amenaza del Girona. Mojar en el Pabellón Anaitasuna es vital. Incluso definitivo si los catalanes no logran superar al Burgos. El Iruña, por su parte, asegurada la fase de ascenso aunque aún sin definir si será en la séptima, la octava o la novena posición, no se lo pondrá nada fácil. Primero porque juega en casa, segundo por el deseo de resarcirse de la derrota de la primera vuelta. Y tercero, para evitar al segundo clasificado de la competición regular.