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Vuelta a casa en el peor momento
Claudio regresa al Helmántico para jugar ante «su» Unión. Militó en el equipo charro hace quince años en la máxima categoría. Su anterior club y el actual pelean hoy por no bajar a Segunda División B
El partido que pasado mañana juegan en el estadio Helmántico el Salamanca y la Deportiva será especial para el entrenador del conjunto berciano. Éste militó en la Unión durante una temporada y media como futbolista y dejó una gran impronta. Como le sucede en La Coruña o en Elche, Claudio es muy querido en Salamanca por la parroquia del equipo albinegro.
Aunque ya ha visitado el Helmántico como entrenador con el Elche (también se ha enfrentado al RC Deportivo en la Copa del Rey), el choque de este domingo va a ser de igual modo especial y tendrá connotaciones especiales, pues tanto su actual equipo como el que fuera suyo se están jugando la permanencia y la situación de los dos es muy complicada.
Claudio llegó a Salamanca tras su exitoso paso por el RC Deportivo, con una Copa del Rey bajo el brazo recién conquistada ante el Valencia CF. Por su parte, el Salamanca acababa de ascender a Primera División en una épica promoción ante el Albacete, al que derrotó en el Carlos Belmonte por 0-5 tras caer en campo propio 0-2. Juan Manuel Lillo fue su entrenador en el cuadro charro. Aunque hubo grandes momentos, como un partido ganado al Valencia por 4-0, y Claudio llegó a los once goles en la máxima categoría, la UDS acabó descendiendo. En la parte final de la temporada fue Jorge D´Alessandro su entrenador, quien curiosamente le llevaría a los banquillos como segundo en la 2000-2001, una temporada después de haber vuelto a estar a sus órdenes en el Elche CF.
Claudio también jugó en Salamanca en la Liga 1996-1997 en Segunda División. Aquel año fue el del retorno del cuadro unionista a la primera categoría, aunque el de Manises poco pudo contribuir a ello. De hecho, en la recta inicial se fracturó el tabique nasal y rescindió contrato. El Salamanca echó a Joao Alves y contrato a Andoni Goikoetxea, pues la situación deportiva no era buena. Con el vasco la trayectoria fue excepcional y tras una increíble remontada, ascendió en el último partido en Mendizorroza. El hoy técnico de la Deportiva lo vio desde la barrera y Goikoetxea se lamentó de que no hubiese continuado junto a Pauleta, Zegarra o César Brito en el cuadro helmántico. Ahora Claudio llega al estadio de Villares de la Reina con su equipo colista y se verá las caras a otro que va cuesta abajo y sin frenos. Los dos están en plaza de descenso y la situación es poco menos que dramática. Las ironías del destino pueden hacer qu Claudio deje a la Unión «herida de muerte», siempre que la Deportiva gane en el campo charro.
El técnico del conjunto ponferradino estableció ayer una sesión de trabajo a puerta cerrada, en la que se preparó principalmente las jugadas de estrategia.