FÓRMULA 1. GRAN PREMIO DE ESPAÑA
Alonso corre sin gomas
La degradación de los neumáticos deja en quinta plaza su gran salida en Montmeló
Sebastian Vettel estrenó su palmarés como triunfador en el Gran Premio de Españatras protagonizar una carrera en la que se vio que Red Bull está uno o dos niveles por encima del resto. Hamilton fue el único que mantuvo el ritmo del alemán. Llegó a su rueda y le hizko sufrir, tal y como admitió el propio piloto teutón. El podio lo completó un Button que encontró premio a la apuesta a una estrategia distinta: mientras todos iban a cuatro paradas, él fue a tres.
Fernando Alonso nos dejó en la retina una de las imágenes del año, con su mejor salida de la temporada y una de las mejores de su carrera. El español, que partía cuarto, se colocó primero en la primera curva tras deshacerse de unos sorprendidos Red Bull, sobre todo de un Vettel que peleó con uñas y dientes para que el ídolo no llegara a la primera enlazada a la cabeza. El estallido de júbilo de las gradas de Montmeló, menos abarrotadas que otros años (se estiman algo más de 78.000 espectadores, en niveles de 2001) duró hasta la vuelta 19, con Alonso liderando por primera vez esta temporada una carrera.
El ritmo del español era netamente inferior al de sus perseguidores, y primero Vettel -mientras Alonso y Webber estaban en boxes-, y después los dos McLaren y el propio Webber, atrasaron al español hasta la quinta posición, que no abandonaría hasta el final. La clave de esta pérdida de competitividad vino por el pésimo comportamiento de los neumáticos duros. Alonso se mantuvo relativamente fuerte durante los dos primeros «stints» de los cuatro que hizo, es decir, mientras llevaba calzadas las gomas blandas. Sin embargo, en cuanto puso el juego de neumáticos duros, el asturiano desapareció de la lucha por la cabeza. Poco a poco fue perdiendo ritmo, concretamente rodaba una media de un segundo y medio más lento que los primeros puestos, y encima tuvo que aguantar un último «stint» muy largo, de 26 vueltas, con unos neumáticos duros que en absoluto le estaban dando el rendimiento esperado.
Toro Rosso no está, ni muchísimo menos, al nivel que se preveía e n los test invernales. Que Sebastian Buemi y Jaime Alguersuari no puedan luchar con normalidad por los puntos empieza a no sorprender a nadie. Que el suizo supere al español, por desgracia para la afición de nuestro país, tampoco pilla a nadie de nuevas. Buemi acabó 14º y Alguersuari 16º. Ya antes de subirse al monoplaza, Alguersuari avisó que el aumento de temperatura en este Gran Premio le podía afectar al rendimiento de sus neumáticos. Y así fue: tuvo que cambiar de una estrategia a tres paradas a una de cuatro, ya que desde la vuelta 12 sus ruedas«se habían ido».
No obstante, no fue esa la única causa de acabar tan atrás. El barcelonés se excusó en que también había tenido problemas con algunos doblados. Además, a punto estuvo de perder un puesto después de la carrera. Alguersuari fue investigado junto a Webber, Button y Hamilton por haber aflojado el ritmo con banderas amarillas, desplegadas a causa del acciden te de Kovalainen, uno de los tres abandonos de la prueba junto a Massa (problemas con el cambio) y Liuzzi. Finalmente, tras estudiar las alegaciones de los equipos, la FIA decidió no sancionar a ninguno de los pilotos, que sólo se llevaron un aviso por parte de los comisarios.
La actuación de la escudería Hispania Racing se puede calificar con un suficiente. El inicio de la prueba del equipo español fue muy convincente, con Liuzzi muy agresivo y pugnando de tú a tú con sus rivales, pero un problema mecánico le hizo abandonar. Karthikeyan, que fue a menos, finalizó la prueba, en última posición.
La sensación general que ha quedado tras la carrera de Montmeló ha sido que poco o nada ha cambiado. Sebastian Vettel sigue afilando su dedo índice, conforme nos deleita con actuaciones que desde Schumacher en 2002 no habíamos visto.
Sólo McLaren, que sin duda es el equipo cuyas mejoras se han implementado mejor, es capaz de ponerle en apuros. Ferrari sigue con problemas y la declaración como ilegal de los alerones traseros no ha hecho más que frenar sus planes. Por muchas actuaciones casi mágicas de Fernando Alonso, si el F150 Italia no mejora la gestión de los neumáticos, poco podrá hacer el español en este Mundial.