El viento puede provocar sorpresas

La etapa del Tour de hoy se disputa entre Carhaix y Cap Fréhel, de 164,5 km., puede deparar sorpresas por la presencia del viento, que en esta zona del norte francés suele soplar desfavorable al sentido de la carrera.

Se trata de un recorrido que, aunque no tenga serias dificultades orográficas, se puede considerar «pestoso», según el argot que se maneja en el pelotón, con constantes subidas y bajadas, y que podría ser un escenario para la batalla si el viento se presenta en la segunda parte de la etapa.

La única dificultad del día está situada en el km. 45,5, y se trata de la cota de cuarta categoría de Gurunhuel, de 2,3 km. al 5,1 por ciento de pendiente, una tachuela que no debe impedir que la carrera vaya lanzada en su primera fase. Llegando a orillas del mar, en Saint Quay Portrieux, km. 89, los equipos decidirán el enfoque de la etapa. El terreno sigue ofreciendo toboganes en las Costas de Armor, carreteras por donde se entrenaba el legendario Bernard Hinault, cinco veces ganador del Tour de Francia.

Según el «caimán», el viento puede ser un factor para romper la carrera.