Encuentro de la pesca
El escenario se trasladó a la zona del Cuatro Valles donde se encuentran los ríos mas emblemáticos de la trucha
Un pescador tratando de capturar una trucha.
Esos encuentros, a los que se invita a diversos medios de comunicación relacionados con el mundo de la pesca, y que tienen como objeto dar a conocer cada año una zona de León dentro de la enorme diversidad de la geografía leonesa, van ganado interés y nivel organizativo año tras año.
El celebrado en 2010 tuvo como objetivo la comarca de Sahagún y Valderas, con el valle del Cea junto con el bajo Esla en Mansilla y Villasabariego. En esta ocasión el escenario se trasladó al Norte, a la zona del Cuatro Valles donde se encuentran los ríos mas emblemáticos desde el punto de vista de la trucha y el paisaje de montaña.
Las cuatro jornadas se repartieron entre los ríos Torío, Bernesga (las dos primeras) para finalizar en el alto Sil y Omaña. En todas las jornadas además de la pesca los invitados pudieron conocer, disfrutar y valorar la amplia oferta hotelera y de turismo rural, junto con la rica gastronomía como principales atractivos turísticos.
Entre los asistentes al encuentro cabría destacar a Juan Delibes, de Digital Plus o a José Luis Martín del Jueves, pero también destacados colaboradores del Mundo de Valladolid, de Portugal, Austria, Argentina y Francia, sin olvidarnos del mítico Campeón de España de Caza, colaborador de Onda Cero, Ismael Tragacete.
El complejo esquema organizativo, que pretendió y en parte consiguió presentar una panorámica amplia de estos maravillosos valles, contó con la inestimable colaboración del Grupo de Acción Local de Cuatro Vales, que preside Cipriano Elías -œPano- y con los guías de Pesca de Ninf@ Calidad con Miguel Angel Fernández y Tomás Gil en la coordinación. El arduo trabajo realizado debió de merecer la pena si se considera la satisfacción mostrad por los asistentes al encuentro.
No hubo privilegios para los participantes en las jornadas. Los tramos libres ordinarios y libres sin muerte, a los que puede acceder cualquier aficionado, fueron los lugares de pesca.
La cicatería de la Junta de Castilla y León, a través de la Sección de Vida Silvestre II, generosa en otras ocasiones con otros eventos de nula proyección turística y deportiva, puso en evidencia una vez mas la ausencia de altura de miras y la mediocridad de la Administración.
La dificultad no arredró a los participantes que en varias ocasiones, consiguieron capturas en cantidad y calidad.
También algún que otro fracaso deportivo rápidamente olvidado ante una buena mesa de productos de León regados con un Bierzo o un Prieto Picudo.