fútbol. Las secuelas del descenso administrativo
No rotundo a una línea de crédito
Nadie de la Cultural se ha puesto en contacto con Caja España-Duero para negociar un préstamo a cuenta de las subvenciones. La entidad bancaria lo descarta y exige antes cobrar lo que le debe el c
Santi Santos, Diego Calzado, Chema Mato y Mena esperan tener negociaciones fundadas.
Como primera medida para afrontar la deudas más urgentes (con la Seguridad Social y la Agencia Tributaria), que por otra parte paralizan la entrada de subvenciones procedentes del Ayuntamiento de León y de la Diputación Provincial, Javier Baena intenta vender el piso que era utilizado como sede social del club antes de mudarse al estadio Reino de León, situado en la calle República Argentina, en pleno centro de la ciudad leonesa, pese a que la vivienda está hipotecada por Caja España-Duero como aval de una importante cantidad económica que la sociedad deportiva debe a la entidad bancaria. La estrategia económica de Javier Baena incluye la venta de las antiguas oficinas de la entidad situadas en la calle República Argentina por 192.920,75 euros para saldar la deuda contraída con la entidad financiera Caja España-Duero.
Hasta que la Cultural no cumpla su compromiso con Caja España-Duero, la respuesta a la posibilidad de abrir una línea de crédito con la entidad bancaria es un no rotundo. Además, nadie de la sociedad deportiva culturalista se ha puesto en contacto con Caja España-Duero para negociar un préstamo a cuenta de las subvenciones municipales. La entidad bancaria lo descarta y exige antes cobrar lo que le debe el club.
El piso utilizado en su momento como sede del club está hipotecado por Caja España hasta los 110.000 euros, además de los preceptivos intereses, que la Cultural adeuda a la entidad financiera. La supuesta línea de crédito está por ahora descartada.