Villaécija puja por oro
La leonesa parte hoy como una de las rivales a batir en los 10 kilómetros en aguas abiertas
Do s retos en uno. Ese es el cometido que afronta a partir de las tres de la próxima madrugada hora española (9 de la mañana en Shanghai) afronta Érika Villaécija en el Mundial de China donde la nadadora leonesa tiene hasta tres opciones de subise el podio, dos en piscina y una en aguas abiertas, competición con la que precisamente levanta el telón a la principal reválida camino a los Juegos Olímpicos del 2012.
Érika, que en diciembre del pasado año se coronaba como la reina de los 800 metros a nivel mundial en piscina de 25 metros, es consciente que para estar en Londres debe concluir entre las diez primeras. Pero también que después de sus últimas demostraciones en la Copa de Europa LEN y el Nacional con sendos triunfos en los 5 y 10 kilómetros respectivamente sus opciones de colgarse una medalla son muy altas. Su estado de forma y la progresiva aclimatación a distancias más largas que los 800 y 1.500 metros donde mejor se desenvuelve son sus mejores argumentos. Prueba de ello es que la Federación confía en la cepedana de Cogorderos como una de sus mejores bazas para tocar el podio en la primera semana de competición mundialista en tierras chinas.
Ubicada su presencia en la pileta en los 800 y 1.500 metros para la próxima semana, en esta Érika afronta los 10 kilómetros en aguas abiertas dispuesta a llevarse una de las tres preseas en juego. ¿Y por qué no la de oro? A priori la leonesa pare como una de las favoritas a la gloria a pesar de que apenas lleva un año preparando esta modalidad de la natación. Villaécija tendrá al menos otras cinco o seis rivales en la puja por los lugares de privilegio destacando a las nadadoras australianas, norteamericanas y alemanas como las más consistentes. El Jishan City Beach de Shanghai será el escenario de una prueba que dará comienzo a las 9 horas en China, seis menos en nuestro país en la que además de las rivales el mayor peligro para la cepedana recaerá las altas temperaturas del agua. El circuito apenas cuenta con corrientes lo que perjudica a los españoles.