Europa como bálsamo y necesidad

La Liga de Campeones vuelve a llamar de nuevo a la puerta de un Reale Ademar que encara la jornada europea de hoy sábado ante los húngaros del Pick Szeged con ciertas urgencias. La primera, la necesidad de resarcirse con una victoria del primer tropezón liguero el pasado miércoles en la cancha del Caja3 Aragón. La segunda, la conveniencia de sumar su primera victoria como visitante para afianzarse en la Liga de Campeones y posicionarse ya claramente como uno de los cuatro equipos de su grupo que pasen a la siguiente ronda de la máxima competición continental, la de octavos de final. Entrar en ese selecto cuarteto pasa por no ceder puntos en casa y ganar el menos un partido como visitante. Y está claro que las dos canchas más propicias para conseguirlo son la del Pick Szeged y la del Partizan de Belgrado.

Por eso el envite de esta tarde tiene algo de match ball para el equipo leonés. Y el técnico leonés, Isidoro Martínez, lo afronta con ambición porque sus miras en la Liga de Campeones son elevadas. «Yo quiero mirar un poco más arriba del lugar en el que se nos coloca. Quiero luchar por un puesto que no sea el cuarto si puede ser, lo que pasa es que tenemos tres toros muy bravos con los que lidiar», manifestó en relación al Montpellier francés, el Copenhague danés y el Kiel alemán, los tres teóricos «ocupantes» de esos tres primeros puestos del Grupo D donde se encuentra encuadrado el equipo leonés.

Pero la empresa no es sencilla. Los húngaros juegan en casa y son conscientes de que una nueva derrota les pondría muy cerca de la eliminación de la Liga de Campeones.