FÚTBOL. COPA DEL REY | falta 1 DÍA
El búnker blanco en Ponferrada
La expedición del Madrid llega esta noche a la capital berciana y se refugiará en el hotel Celuisma hasta una hora y media antes del partido. La seguridad y la intimidad están garantizadas para los merengues.
Una de las habitaciones donde dormirán los madridistas.
El Real Madrid no viajará a Ponferrada de turismo, ni mucho menos. El vigente campeón de Copa iniciará mañana su defensa del título en la capital del Bierzo y, aunque los presupuestos y las categorías sitúen a los blancos como claros favoritos, en el ánimo de Mourinho no está el hacer ninguna concesión al rival.
Acceder a los componentes de la expedición merengue será misión prácticamente imposible, ya que nada más llegar a Ponferrada se recluirán en el hotel Celuisma y, salvo cambios de última hora, no lo abandonarán hasta el momento de dirigirse al Toralín para disputar el partido ante la Deportiva.
La elección del que será cuartel general del Madrid responde a muchos condicionantes. Por un lado, las exigencias del conjunto blanco en cuanto a número de habitaciones, salones para realizar las comidas y la charla previa al partido, así como otra sala donde los jugadores harán estiramientos la mañana antes del partido. Por otro, la situación, alejado del centro de la ciudad y aislado al fondo del barrio de La Rosaleda, lo que permitirá reforzar la seguridad del perímetro.
Tal es el celo del club de Concha Espina por prevervar la tranquilidad e intimidad de los jugadores que incluso ha firmado una cláusula de confidencialidad con el hotel que le impide a este comunicar a la prensa ningún detalle más allá de la hora de llegada y salida del equipo. También es imposible acceder a las habitaciones que ocuparán los madridistas o conocer el menú que servirán en las comidas.
En cualquier caso, y dado que la hora de llegada de la expedición merengue está fijada en torno a las 20.30, no es difícil aventurar cómo será la previa del partido para Mourinho y los suyos. En la jornada de hoy apenas habrá tiempo para ubicarse en las habitaciones y cenar antes de la hora de dormir. Mañana el equipo se ejercitará dentro del propio hotel y, tras la comida, será el momento para la siesta. Antes de partir hacia El Toralín, a las 18.30, el equipo recibirá la última charla técnica del entrenador. En función del tiempo, no se descarta que algunos de los jugadores salgan a dar un paseo por las inmediaciones del hotel.