La Deportiva planta cara al Madrid (0-2)

Cuatro días después de sucumbir ante el Barça, el Madrid fue un equipo muy profesional en El Bierzo, evitó sorpresas en una Copa siempre traicionera y sentenció su pase a octavos. Comprobó que ni siquiera en Segunda B hay enemigo pequeño, pero nunca se arrugó ante la abnegada Ponferradina e impuso su mayor calidad técnica con los goles de Callejón, un jugador que siempre cumple cuando sale, y Cristiano, ansioso tras los abucheos sufridos en el Bernabéu. La peor noticia para los de 'Mou' fue la expulsión de Albiol, un internacional que acusó su inactividad y midió mal en un par de acciones. Y también comprobar que Granero no cuenta y Sahin sigue lejos de recuperar el nivel que le permitió ser el mejor en su puesto en la exigente Bundesliga.

No fue como el año pasado en Murcia, donde el Real Madrid se presentó prácticamente con su equipo de gala para empezar con buen pie una competición 'maldita' y evitar más 'alcorconazos', pero el equipo de Mourinho se tomó muy en serio la visita a tierras bercianas. Supo el portugués persuadir a sus hombres, un mixto entre titulares y suplentes, de la garra no exenta de calidad de la Ponferradina, un 'grande' en Segunda B. En un campo coqueto y pequeño, se trataba de jugar con máxima concentración y de meter el pie. Nada de arrugarse ante unos adversarios que disfrutaban del partido de sus vidas y luchaban como colosos.

Con el capitán Marcelo, Khedira, Kaká, Higuaín y, sobre todo, Cristiano, como personajes más ilustres en el Toralín, los blancos se plantaron bien en un terreno muy pesado por la lluvia. Evitaron toques superfluos y trataron de jugar de forma práctica. Sin brillo pero sin riesgo. Era cuestión de aguantar el arranque, de no encajar algún gol que espoleara a los locales, de adaptarse cuanto antes a las condiciones desfavorables y de esperar a que a los leoneses se les fuera acabando el fuelle para comenzar a generar ocasiones. Y el plan trazado salió bien. Sustos iniciales Tras algún susto inicial, como un centro pasado mal despejado por Adán o una bella chilena del brasileño Yuri, 'O'Fenómeno del Bierzo', los de 'Mou' plasmaron su indiscutible superioridad. Las ocasiones llegaron.

La mejor, una de Cristiano, tras gran pase al primer toque de Marcelo, que desvió el portero en una salida casi de balonmano. Después, Callejón se internó, quiso asistir a Cristiano en lugar de ser egoísta, pero se la pasó demasiado fuerte. La incertidumbre se acabó con el buen gol de Callejón, atento para desviar un buen servicio de Khedira. Antes del descanso, Varane pudo ampliar la ventaja, a la salida de un córner, pero cabeceó sin puntería. Con la inercia favorable, el Madrid se lo tomó con excesiva relajación en el descanso. Dio 'vidilla' a los blanquiazules, que rondaron el empate en acciones aisladas. La más clara, un centro de Domenech que se envenenó tanto que se estrelló en el travesaño. Sorprendió a Adán y también a Yuri, que desaprovechó el rechace. Los de 'Mou' se limitaban a esperar para aprovechar los espacios, cada vez mayores, al contragolpe. Higuaín intentó hacer la de Messi, pero presentarse en el área driblando desde tan atrás no es lo suyo. Decaía el choque pero lo animó Albiol, que se ganó la expulsión por dos amarillas claras. 'Mou' cerró filas con Ramos en lugar de Albiol. Y regaló un cuarto de hora Granero, el 'Pirata' marginado Cristiano cerró el partido y la eliminatoria. Apenas lo celebró y se fue a la ducha. Minutos para Jesé mientras en la grada cantaban el «A Ponferrada voy»