Los elogios de la ‘Saeta’

Los ecos del partido que enfrentó a Ponferradina y Real Madrid el pasado martes en El Toralín siguen resonando en la prensa nacional. Si el miércoles todas las crónicas elogiaban el juego desplegado por los blanquiazules y la actitud de la afición deportivista, ayer era el turno para las reflexiones más reposadas, una vez pasada la euforia inicial.

Una de ellas merece la pena ser rescatada por venir de quien viene. Ni más ni menos que Alfredo Di Stéfano, leyenda viva del madridismo y presidente de honor del club blanco, que centró en el partido de Copa su columna semanal en el diario Marca.

Di Stéfano arranca su artículo remarcando que «fue un partido de esos en los que el bueno y el malo quedan bien», siendo la Deportiva «el bandido, no por falta de calidad, sino por ser nuestro rival a batir». Sigue don Alfredo con las metáforas al identificar a la Ponferradina con «una perra que mordisqueó los tobillos y supo muy bien qué hacer si se le negaba un pedazo de carne».

Los elogios de «La saeta rubia» no acaban en el pundonor demostrado por los bercianos, que no se amilanaron en ningún momento ante algunos de los mejores futbolistas del mundo sino que los extiende a su juego: «La Ponferradina luchó por jugar de tú a tú y consiguió hacer desaparecer un asunto: que ganar partidos de Copa del Rey sea coser y cantar».

A partir de ahí, el futbolista que marcó para siempre la historia del Real Madrid comienza su halago a Callejón, el jugador que logró encontrar los puntos débiles de la Ponferradina, «que fueron siendo más evidentes según transcurría el juego».

Por si acaso, al igual que Mourinho, Di Stéfano no da la eliminatoria por cerrada hasta que se acabe el partido del Bernabéu y deja un consejo para la plantilla blanca: «No desmayar contra nadie, ni contra el grande ni contra el pequeño, la liebre puede saltar en cualquier momento».