Dos Copas en las vitrinas

La Copa Asobal es un torneo que tradicionalmente se le ha dado bien al Reale Ademar. Conocido también como el torneo del k.o. porque decide un título en sólo dos partidos —semifinal y final— el equipo leonés lo conquistó en dos ocasiones. La primera se remonta a 1998 en Zaragoza cuando comenzaba a presentar hechuras de equipo grande ante un Barcelona que era conocido como el Dream Team por su potencial. Fue necesaria una prórroga pero el Ademar se impuso al final por 31-30. Estaba Manolo Cadenas en el banquillo

La segunda, mucho más reciente, fue a finales de diciembre de 2008 en una especie de «maracanazo» en el Palau en una edición que fue pensada y diseñada para que se la llevase el Barcelona (entrenado entonces por Manolo Cadenas) pero que cayó del lado leonés para sorpresa de todos. Fue un partido perfecto del equipo entrenado por Jordi Ribera que literalmente sonrojó a un Barcelona que, curiosamente, tenía a Manolo Cadenas en el banquillo azulgrana. Aquella dolorosa derrota por 25-31 (de nuevo 31 goles) acabó costándole la destitución unos meses después. Una Copa que se convirtió en el último gran trofeo que ha entrado desde entonces en las vitrinas del club leonés que quiere y desea hacer sitio para una nueva: la de esta edición.

El camino es difícil pero posibilidades las hay. Esta edición de la Copa Asobal viene marcada por las diferencias que hay en entre el Atlético de Madrid y el Barcelona, los dos grandes favoritos al título. Pero también habrá que ver como llegan ambos —si lo hacen muy castigados en este final de primera vuelta— o si afrontan el torneo más relajados que el resto. Ese será el factor que debe aprovechar el Reale Ademar para aspirar al título.