Palencia, Zamora y Guijuelo podrían perder la categoría
La decisión de la comisión mixta formada por Real Federación Española de Fútbol y Asociación de Futbolistas Españoles de exigir un aval bancario a los clubes que quieran militar en Segunda División B que la temporada pasada arrastraran deudas, obliga a Zamora y Guijuelo a presentar el mismo por importe de 125.000 euros y al Palencia, por importe de 200.000 euros, del 1 al 5 de julio, perdiendo la categoría si no cumplieran con tal requisito.
Si alguno de ellos perdiera por este motivo la categoría, el grupo octavo de Tercera División vivirá una situación similar a la de la campaña recién finalizada, volviendo a ser supernumerario, y teniendo que aumentar las plazas de descenso en el número de equipos que caigan por ese motivo y alargando de nuevo la competición a 42 jornadas.
Si fuerzan los tres los que no pudieran hacer frente al aval exigido por Federación y Asociación, el grupo octavo no podrá pasar de 22 equipos, por lo que el Salamanca B sería el gran perjudicado al descender también a la 1.ª División Regional de Aficionados, arrastrando a su vez al Navega, equipo que volvería a la 1.ª División Provincial de Aficionados de Salamanca.