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Lucha Leonesa. Liga de Verano

Quintana de Rueda y Vega

Moisés Vega, en su primer corro de la liga, se llevó el primer puesto de ligeros, el trofeo de una cazadora y algunos de los mayores reconocimientos de los aficionados en Quintana de Rueda.

Ibán Sánchez perdió su igualdad en el liderato ante Víctor Llamazares y éste la final de ligeros ante Moisés Vega.

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A. Barreñada | Quintana Rueda
León

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Tercer corro del Trofeo de la Regularidad, organizado por el ayuntamiento de Valdepolo, en Quintana de Rueda, donde se reencontraba la afición con esta «Liga de Verano» que a inicios de junio tuvo sus dos primeras convocatorias.

Buena tarde en ambiente, cuidado el terreno, unos quinientos espectadores en la grada, y los arbitrajes de Avelino García y Juan Pablo Tejerina, a lo largo de tres horas. Se sumó la disputa del trofeo de la «cazadora» de Riol Peleteros, en categoría de ligeros.

Ese premio especial, del que hacía entrega el histórico luchador local Luis Padierna, se lo llevaba el gran protagonista de la jornada: Moisés Vega. El de Cistierna llegó con ímpetu, calidad y ganas a su primer corro de la temporada. Le sacó el máximo rendimiento.

Fue Moisés el último de los clasificados en primera ronda del peso inferior, en la que se impuso a Javier Oblanca, tras recibir media en contra, con media y dos enteras, destacando con media-vuelta, maña que a lo largo de toda la tarde iba a ejecutar de manera espectacular. De cuartos saldrían adelante Ibán Sánchez, Víctor Llamazares, Yúliver Álvarez (los tres más destacados de la general) junto al propio Moisés. Se impuso Víctor a Ibán en primera semifinal (2-0) y lo hizo el de Cistierna ante el de Tejedo del Sil por igual resultado.

Ibán anotó la tercera plaza también con dos enteras limpias ante su compañero de equipo y la final, llena de emoción, incluso de polémica, manifestada desde la grada por decisiones arbitrales.

Primera entera para Moisés Vega, Igualada para Ibán Sánchez, que se protestaba como media; media más para el del San Guillermo, que se pedía igual a la anterior (si aquella entera, esta no menos), a la que siguió, en el culmen de la señalada emoción, una nula. Y poniendo fin, gochona del de Cistierna que se ganó los mayores aplausos de la afición.

Si lo disputado en esa fase era del mayor atractivo, mereció doblarse, repetirse: el trofeo de la «cazadora» le correspondía en esta edición al peso ligero y, tras el sorteo, coincidían los emparejamientos de las semifinales disputadas. Se impuso de nuevo por dos enteras Víctor a Ibán; lo hizo igualmente Moisés ante Yúliver, y se volvía a vivir la final de hacía unos minutos.

Víctor por delante con primera caída a su favor, igualada de Moisés que un aficionado dijo ser «tan plana, que ahí no hay media que valga», y media más. La cazadora, como el primer puesto de la tarde, para Moisés Vega en su primera aparición.

El luchador local Ricardo Nuno Pinto no pudo recompensar a una afición fiel como él hubiera deseado: fue el primero en caer en el peso de medios, ante Diego Escanciano.

Diego Arce en excelente forma, se impuso en su primer combate a Adrián García con entera de garabito, media por suelta y guapa cadrilada. Pasó Alberto Marquiegui, gallo de este peso, y pasó Fernando Martínez, «El Rubio» de Campohermoso que en este tercer corro ya ajustó su cuenta con la báscula.

Buena luche la que puso en Quintana Luis Miguel Moro, que habría de retirarse sin poder disputar el tercer puesto (mancado en un pie), no menos buena la de Alberto Novoa, quien le ganaría la primera semifinal al de Sanfelismo. Y Fernando, la segunda a Diego, quien resistió un primer voleo del Rubio, imponiendo su primera media caída, antes de recibir la media por haberse soltado y dos caídas enteras del luchador de Campohermoso.

Arce, con el tercero tras la señalada lesión de Luismi, y Fernando, cerrando su primera victoria en medios con cadriladas de Peña Negra ante Novoa, que se sitúa líder.

De manera «llamativa» Fernando Martínez consta en este momento entre los cuatro primeros de medios y de semipesados.

Entre los de esta categoría, el triunfo en el corro del ayuntamiento de Valdepolo se lo iba a anotar Jesús María Cabero.